La muerte de Mijaíl Gorbachov se conoció a última hora de este martes 30 de agosto y provocó cierto sobresalto en la única televisión 'todo noticias' de España, el Canal 24 Horas, cuya redacción estaba tan tranquila como se puede estar en la recta final del mes de agosto.
Dada la entidad del último presidente de la URSS, la cadena pública consideró necesario improvisar un informativo especial con el que estar a la altura del inesperado acontecimiento, para lo cual contó con una de sus periodistas más experimentadas en información internacional: Anna Bosch.
Por la rapidez con la que reaccionó TVE, a los espectadores quizá les dio la impresión de que la reportera, corresponsal en Moscú durante años, estaba en la redacción de Torrespaña cuando se conoció la noticia, pero nada más lejos de la realidad.
Ni siquiera estaba trabajando en ese momento. De hecho, es posible que tuviera la mente en otros asuntos que nada tienen que ver con la geopolítica ya que estaba cenando con dos amigas a las que no ve con mucha frecuencia. Pero el teléfono sonó antes de la medianoche y tuvo que salir escopetada del restaurante.
Así lo explicó ella misma en Twitter pasada la una de la madrugada cuando ya había acabado su intervención en el informativo improvisado por la televisión pública: “A las 23:25 horas estás de sobremesa, verdejo y jijiji-jajaja con dos amigas a las que ves –con suerte– una vez al año, y a las 23:55 estás en el estudio del Canal 24H”.
La llamada de sus compañeros alteró la velada. Cuando una de las comensales, la también periodista Yolanda Monge, vio que saltaba la noticia de la muerte del expresidente ruso, se deshizo de la copa de vino de Bosch y le ofreció un café para hacer más llevadero el brete en el que la acababan de poner.
“Memorable ese instante en que Yolanda Monge ve el 'urgente' de la muerte de Gorbachov y en fracciones de segundo, mientras yo devuelvo una llamada a Edición, agarra mi verdejo recién servido y lo echa a la cubitera. ¿Te pido un café? No, ya me lo haré en la redacción de camino al plató”, relata la periodista al compartir con sus seguidores la 'intrahistoria' de esta huida que posiblemente se parezca a otras muchas que le hayan ocurrido a lo largo de sus años como corresponsal.
Cogió un taxi y poco después ya estaba en el plató del Canal 24 Horas, donde le esperaba el presentador Moisés Rodríguez, que había rellenado los últimos minutos con los pocos detalles que se conocían hasta el momento.
TVE emitió casi de inmediato un vídeo con la necrológica del político, algo que también llamó la atención de muchos espectadores a los que sorprendió la rapidez con la que se había grabado esta pieza.
Sin embargo, tal y como aclaró la veterana periodista de TVE, el vídeo ya estaba grabado. Esto es algo habitual cuando se trata de personajes relevantes que están gravemente enfermos o han alcanzado ya una edad importante.
“La necrológica ya estaba hecha, práctica básica en un medio informativo”, asegura la reportera, que no niega que todo lo demás, lógicamente, se preparó 'a rebato': “La intervención fue a lo Speedy González vía taxi y dejando la cuenta para pagar a otra comensal”.