“Nos equivocamos muchas veces y, sin ninguna duda, esta ha sido una de mis grandes equivocaciones de la edición”. Con estas palabras reconoció Antonio Orozco este viernes en La Voz que tendría que haber dado una oportunidad a Ronia, una concursante que se ha acabado convirtiendo en “la tormenta perfecta”.
Cuando la aspirante canaria, de 33 años, pisó el escenario por primera vez hace unas cuantas galas, el cantante no pulsó el famoso botón rojo de su asiento. Permaneció de espaldas a la joven, que sí pudo incorporarse al equipo de Malú.
Anoche, durante el Asalto Final, Ronia tomó el micrófono una vez más para deleitar a los coaches. Orozco, maravillado por su talento, reconoció ante todos que había cometido un error.
“Es una tormenta de ilusión, alegría, buen rollo, de musicalidad y ritmo. La voz es una cosa de otro planeta. Pero nos equivocamos muchas veces y, sin ninguna duda, esta ha sido una de mis grandes equivocaciones en esta edición. Lo fue no darme la vuelta contigo porque eres la tormenta perfecta”, le dijo.
“No me imaginaba estar aquí”, comentó ella, abrumada por las palabras del catalán, y por haber aguantado tantas galas en el exitoso programa de Antena 3. Minutos después, Ronia fue eliminada de la ronda final, para la que fue elegida Larisa.