Karlos Arguiñano ha vuelto a hacer gala de su conocido sentido de humor, aunque esta vez para bromear sobre el largo y multitudinario funeral de Isabel II. Este miércoles, durante la emisión de Cocina abierta de Karlos Arguiñano, el chef de Antena 3 aprovechó que estaba cortando unas patatas para comentar el histórico último adiós a la monarca británica. Eso sí, a su manera. “Oye, ¿qué me decís de la reina de Inglaterra, que ha viajado más de muerta que nosotros de vacaciones?”, preguntó el cocinero a su audiencia. “La han movido bien a la abuela. Joder. Estará quejosa. A veces te meten unos meneos, ¿verdad?”, añadió a continuación.
Lejos de quedarse ahí, Arguiñano también tuvo unas palabras para el nuevo rey, Carlos III. “¿Y cómo estará mi tocayo Carlos? Qué nervios. A esta edad, a trabajar. Este, que no ha hecho más que cazar zorros y andar de... Este no ha estado vendimiando, no”, aseguró el presentador, que acto seguido lanzó una reflexión sobre la vida de los monarcas: “Qué cosa, ¿eh? Naces en la Casa Real y rey para siempre. Es curioso. Y otros a trabajar siempre. Uno siempre rey y otros siempre a currar. Bueno, pues a nosotros nos ha tocado lo de currar. Venga, pues a currar”
“La cebolla, para levantar la....”
A todo esto, Arguiñano dejó otro comentario que tampoco ha pasado desapercibido entre el público. En concreto, sobre la cebolla, que el otro día generó debate entre Karra Elejalde y Pablo Motos en El Hormiguero. En un momento dado de su charla, el actor de Ocho apellidos vascos, Airbag y Año mariano -película en la que, dicho sea de paso, coincidió con el propio Arguiñano- recomendó al presentador que comiera tortilla de cebolla. Una idea que Motos rechazó de inmediato porque temía que se le quedara mal aliento.
Arguiñano, sin embargo, se encargó de rebatir este miércoles dicho razonamiento. Y lo hizo, de nuevo, a su manera. “El aliento se echa de otras cosas. La cebolla es muy buena para muchísimas cosas. La misma palabra lo dice: la cebolla, para levantar la... ¿Entendéis? Cuando estamos gente mayor no hace falta decirlo todo entero”, comentó el chef entre risas. “Si no, yo de qué tantos hijos. ¡Pues de la cebolla! Está clarísimo”, concluyó en alusión a sus siete vástagos.