Bake Off: famosos al horno celebró su segunda entrega en La 1. La primera en la noche del lunes, su nuevo día de emisión después de que el programa se estrenara el pasado jueves con un dato poco satisfactorio para la cadena pública. El cambio de día no ha dado el resultado que TVE esperaba en audiencias, pero al menos nos ha dejado este segundo capítulo del talent de repostería, que dijo adiós a su nuevo expulsado: Manolo Sarriá.
Antes de la eliminación del cómico llegó la primera prueba, en la que los concursantes tuvieron que replicar un postre en forma de castillo de naipes. Las instrucciones fueron concisas: la decoración tenía que ser con fondant, el ensamblaje con glasé y la estructura debía tener una altura mínima de 25 centímetros. Otra dificultad a la que se enfrentaron los participantes fue la ausencia de molde, por lo que tuvieron que cortar las 15 galletas a mano.
La cata del jurado, realizada a ciegas, determinó que los castillos “menos buenos” fueron los de Yolanda Ramos, Encarna Salazar y Julio Salinas. En cambio, los concursantes que mejores valoraciones recibieron fueron Marc Clotet, Ana Boyer y Julio Iglesias Jr., siendo este último el ganador de la prueba. “Me lo merezco. Primero, porque he terminado mucho antes que todo el mundo. Y encima, lo he hecho bien. Qué más se puede pedir, ¿no?”, dijo el hijo de Julio Iglesias.
El “susto” de Yolanda Ramos
La disputa de la prueba dejó algunas anécdotas. Por ejemplo, el 'susto' que Yolanda Ramos intentó dar a sus compañeros al grito de “¡me he cortado!”, “'¡me he cortado!”. Pero no, no se había cortado. Simplemente fue una forma de comprobar quién habría ido a socorrerla en caso de que se hubiera cortado de vez.
Por desgracia para ella, la mayoría de sus compañeros ni se inmutaron. “Solo habéis reaccionado dos”, dijo en alusión a Rocío Carrasco y Alba Carrillo, que fueron las que más se preocuparon por ella, no así Ana Boyer. “La Boyer está concentrada. Se nota que ha tenido disciplina, estabilidad. Su vida es inmaculada”, comentó Yolanda Ramos en tono de broma.
El recuerdo de Terelu a su madre
Más emotivo fue el momento que protagonizó Terelu Campos, que se acordó mucho de su madre, María Teresa Campos, elaborando este dulce castillo de naipes. “En los últimos años, a mi madre solo le gustaba jugar a las cartas. Tengo que confesar que al principio le hacíamos trampas para que ganara ella. Le pusimos [a la trampa] el nombre de 'Juja'. Decíamos 'Juja', repartíamos las cartas y la dejábamos un póker. No te puedes imaginar su cara de felicidad”, contó Terelu a Paula Vázquez. “Lady Póker' la llamábamos”, añadió poco después.
Pablo Puyol, el mejor de la entrega
En la segunda prueba de la noche, los aspirantes tuvieron que cocinar un postre propio de un hotel de lujo: muy atractivo, jugoso, completo y que incluyera un bizcocho, una preparación cremosa, una textura crujiente y una salsa de frutas. Además, como reto adicional, cada vez que sonaba la campana del timbre característico de un hotel, tenían que parar, limpiar y ordenar toda la mesa para poder seguir cocinando.
En esta segunda entrega, los concursantes recibieron a Belén Écija y Ana Jara, actrices de 4 Estrellas, la serie del acces prime time de La 1, que cataron los postres junto al jurado.
Pablo Puyol se alzó como el ganador de la segunda prueba, así como con el delantal al mejor concursante de la noche, gracias a su 'Atardecer en la playa', con el que quiso dar un toque cítrico a su bizcocho, con un cremoso de limón, un crujiente de avellana y salsa de limón y mango. Alba Carrillo logró la segunda posición con 'Delicia de mar'.
Manolo Sarriá, segundo eliminado de 'Bake Off'
La eliminación se la jugaron Julio Salinas y Manolo Sarriá. Este último fue el expulsado, ya que su su brownie de cacahuetes y chocolate blanco titulado 'Andalucía de punta a punta' no convenció al jurado. La expulsión del humorista fue un jarro de agua fría para sus compañeros, especialmente para los hermanos Salinas, que fueron quienes más la sintieron, con lágrimas incluidas en sus ojos.
Sin embargo, la pena que inundó el ambiente se convirtió en carcajadas en cuestión de segundos. Los que tardó Julio Salinas en llamar “Trini” a Toñi Salazar, la primera expulsada del programa, durante el momento más sentido de su discurso. El cambio de nombre de la cantante no pasó desapercibido para el resto, que tuvieron que llevarse la mano a la boca para aguantar la risa.
“¿Pero qué pasa?”, preguntó Paco Roncero al ver que Sarriá se había ido y Rocío Carrasco, Alba Carrillo, Yolanda Ramos y Blas Cantó no podían parar de reír. “Yo estaba llorando emocionado por lo de Manolo, pero de repente han dicho lo de 'Trini', esta se ha empezado a reír [señala a Yolanda] y yo no he podido parar”, explicó Blas al resto de los presentes.