Cuando a principios de mayo Movistar+ anunció Zasback, principalmente llamaron la atención dos cosas de este nuevo proyecto: que iba a hacer una mezcla poco habitual de monólogos y ficción, y que supondría el “regreso” de Andreu Buenafuente a la plataforma tras el final de Late Motiv.
El formato se estrenó el pasado martes 24 de mayo con Hugo Silva como protagonista, y emitió su segunda entrega una semana después con Anna Castillo. Y este martes 7 de junio, llegó el esperado turno del showman catalán.
Para los que no lo hayan visto, Zasback se basa en un monólogo del protagonista que en determinados momentos se “detiene” para introducir una recreación de alguna anécdota en forma de ficción. Es decir, para que el espectador pueda “ver” y “vivir” lo que pasó, y no sólo para escucharlo narrado por el protagonista.
En el caso de Buenafuente, su entrega se convirtió en un recorrido por su carrera, pero también -y sobre todo- por su vida privada. Porque que empezó en la radio de Reus ya lo sabíamos, o que Carles Francino fue el primero en confiar en él también. Pero no cómo era el Andreu niño, ni cómo preocupaba a su madre, ni cómo era su padre, ni la manera en la que éste le “ayudó” a entrar a la radio plantándose durante horas para ser recibido por el jefe (sin lograrlo), o cómo probó los porros justo antes de tener que salir en antena.
Un recorrido que principalmente sirve de homenaje a su familia, tanto por sus padres como a la que él ha formado con Silvia Abril, pero en el que también hace una cierta autocrítica: sobre sus progenitores, para quitarle hierro a la gravedad que actualmente se le da a bromas o actitudes criticables -y que él y su trayectoria demuestran no ser para tanto-, y sobre él mismo, en parte “repitiendo” las mismas preocupaciones ahora con su hija.
Visualmente, justo esa comparación entre sus “dos familias”, en realidad “su familia” con distintos protagonistas, es llamativa. Porque es cuanto menos curioso ver a Silvia Abril como su madre, a él mismo como su padre, y a su hija (que ya realizó una aparición estelar en la despedida de Late Motiv) interpretándose a sí misma -esta vez sin mostrar su rostro-.
Y también permite volver a unirle a algunos de los colaboradores de Late Motiv, con cameos de Miguel Maldonado o Laura Márquez, y el papel de Lalo Tenorio interpretando al joven Buenafuente.
Una forma diferente de hacer un recorrido y un repaso por las vidas de distintos protagonistas, que produce también Buenafuente a través de El Terrat, junto a La Caña Brothers, que el próximo martes recibirá a María León.