Cosas de la industria y de la fama, los principales focos del South International Series Festival este año no han sido para David Shore, el creador de House y The good doctor que ha comparecido como invitado especial del evento como hemos recogido en verTele, sino para el actor turco Can Yaman. Su imponente presencia física se ha visto rodeada en todo momento de fans que le esperaban a las puertas del Palacio de Congresos de Cádiz resguardándose como podían del diluvio provocado por la DANA, y dentro del recinto ha estado escoltado en todo momento por su guardaespaldas, que le ha seguido muy de cerca incluso situándose al lado del estrado sobre el que ha dado su rueda de prensa en forma de charla con el director del festival, Joan Álvarez.
El intérprete ha comenzado explicando: “Llevo un mes estudiando español, y lo entiendo bien. Pero para hablar no estoy al 100% a gusto, así que en italiano mejor”. Las preguntas se han hecho en español, pero sus respuestas han sido en italiano, algo que también ha explicado: “Hace cuatro años que vivo en Italia”, país en el que ha estado trabajando en varias producciones, aunque ahora quiere enfocar su carrera a España, abriéndose a todo el mercado en español: “Mi nuevo objetivo es poder rodar en español, para eso estoy practicando”. Can Yaman ha explicado que se está preparando con una profesora en Roma, tomando clases de español, y se muestra decidido: “Estoy empeñado en poder aprender bien español y rodar pronto en España”.
De hecho, ha confesado que el reconocimiento en el South International Series Festival de Cádiz es para él muy importante por esta misma razón: “Este apoyo me honra mucho, he hecho series que gustan pero ser reconocido siempre es importante. Estoy vehiculando mi carrera hacia España, y también me gustaría venir más. Ser reconocido es un buen punto de partida para iniciar el camino”. Es muy consciente de que rodar en español le abrirá aún más puertas: “El mundo hispanohablante es muy grande. El español no se habla solo en España, sino en todo el mundo. Si algo gusta en España, es muy fácil que se difunda en todo el planeta, así que es una oportunidad a la que no se puede renunciar”.
El actor de hecho ha querido ejercer de puente entre las producciones turcas y las españolas: “Tenemos algo en comun españoles y turcos, que es que trabajamos muy bien. La comparación no va por las horas ilegales que se echan en Turquía, sino por ese empeño en hacer las cosas bien. En España también hay muchos canales y competitividad, y sois agresivos a la hora de producir proyectos. Turcos y españoles podríamos hacer grandes proyectos juntos”.
El éxito de las series turcas en todo el mundo
Preguntado por el éxito de las series turcas, aunque ha puntualizado que “la pregunta debería formularse a los productores, yo soy solo un actor”, Can Yaman sí que ha contextualizado la distinta industria, sin ocultar que las condiciones laborales en Turquía son muy diferentes: “En Turquía hay tantos canales que la competencia es feroz, si algo no funciona en tres capítulos lo cancelan. Esa competitividad dispara el ingenio. Allí aún no tenemos esa limitación de derechos, por lo que se trabaja mucho y por tanto también se produce mucho”, ha explicado dando el dato de que las jornadas se alargan hasta 18 horas, lo que a él como actor le afectaba mucho.
Pese a ese abuso, reconoce celebrar el éxito de la ficción turca en todo el mundo. “Es un orgullo que las series turcas puedan salir y triunfen en todo el mundo. Ya incluso en el mercado anglosajón hemos logrado ser líderes”, ha presumido.
'Sandokán' y el salto de nivel que ha supuesto 'El Turco'
El actor ha reconocido que esas condiciones de producción en Turquía son “difíciles”, por lo que ha acelerado su salto internacional. Hasta que llegue ese momento de rodar en español, Can Yaman ha explicado que ha terminado de rodar Sandokán (que llegará a España a través de Mediaset) y El Turco. Como él mismo ha contado, tras hacerse famoso en Turquía sobre todo gracias a comedias románticas y a una serie policíaca, estos dos proyectos fuera de su país han sido “colosales y muy distintos”.
De Sandokán ha dicho que fue el proyecto por el que se trasladó a Italia, pero se complicó por el Covid y otras circunstancias y llegó a ser suspendido. En ese tiempo pudo hacer otras producciones en Italia, lo que le permitió rodar en italiano y “enriquecer mi carrera”. Tras Sandokán llegó El Turco, que él mismo define como “la mejor producción de mi carrera”, que acabó de grabar hace dos meses en Hungría, y que desde el primer momento supo “que era un proyecto perfecto para mí”. Interpreta a un guerrero otomano al que expulsan del Imperio Otomano pensando que era un traidor. Con la ambición de limpiar su nombre, tiene que viajar solo y llega a una ciudad italiana en la que comienza a vivir y se enamora de una mujer. Acaba siendo el líder de la ciudad, y luchando junto a su gente.
Mostrando su ambición personal, Can Yaman explica que esa historia de El Turco “en cierto sentido se parece a mi historia, yo también vengo de Turquía y voy a viajar. Al leer el guion me emocioné mucho”. Y confiesa sentirse “orgulloso” de haber podido dar ese salto de nivel: “Es una producción en Italia, con un casting internacional, un héroe, un presupuesto tan alto, rodada en dos países diferentes como Italia y Turquía, y he podido hacer una serie internacional en inglés”.
Muestra su ambición al imaginar la carrera que dejó como abogado
Esa misma ambición surge al preguntarle si alguna vez ha pensado qué habría sido de su vida si llega a seguir su carrera como abogado. Can Yaman ha contestado: “A menudo pienso en qué habría sido de mí si hubiera seguido siendo abogado. Si no fuera actor, seguramente habría sido abogado, pero seguramente también habría intentado ser un abogado internacional, habría intentado siempre ir más allá, y no me habría quedado en Estambul o en ser un abogado de provincias. Habría aprendido más, habría estudiado más, quizás hubiera ido a trabajar internacionalmente a otro país. Y creo que en ese ambiente también hubiera sido famoso. Así que las cosas podrían haber sido similares en ese sentido”.
El actor ha acabado agradeciendo el apoyo incondicional de sus fans: “Es una cosa muy especial, peculiar, que no pasa siempre para un turco, sobre todo. Puede sucederle a una persona que viene de América, pero en mi caso me emociona y es increíble, así que estoy viviendo un sueño. Doy gracias a Dios cada día por este interés, por este amor que estoy recibiendo. En cualquier sitio, aunque llueva como aquí, o con COVID, vienen; y eso me conmueve. Esos fans me aman fuertemente”.