Los días más duros de la pandemia arrebataron a Sálvame uno de sus elementos más preciados: el público presente en plató. El formato de Telecinco no fue el único que continuó sus emisiones en soledad, evidentemente, pero sí uno de los que más notó la ausencia de público en sus gradas. Básicamente, porque los asistentes al plató acostumbraban antes de la llegada del coronavirus dar juego al formato, ya fuese voluntaria o involuntariamente.
Ahora que la situación lo permite, el público ha vuelto a las gradas. Y con él, su esporádico protagonismo, tal y como ocurrió este martes con una espectadora cuyo comportamiento no pasó desapercibido en las redes sociales.
Pasaban unos minutos de las cinco la tarde cuando Anabel Pantoja se puso a defender su valía profesional tras protagonizar un agrio enfrentamiento en directo con Marta Riesco. En ese momento, la cámara se dirigió a la sobrina de Isabel Pantoja, y con ella, a la señora que había justo detrás de su asiento. Una mujer que, llegado el momento, hizo un gesto tan inocente como sacar una botella de agua y beber un poco de ella.
Pero, claro, en tiempos de pandemia eso implica bajarse previamente la mascarilla. Algo que no debió gustar a alguien del equipo del programa, pues nuestra protagonista, alertada, cambió rápidamente el gesto para dejar de beber agua, taparse la boca con la mano y ponerse la mascarilla en cuestión de segundos. Un momento cómico que, como tal, fue muy compartido en las redes sociales.