Cuatro lleva años buscando un formato que reflote su maltrecha franja de tarde. Y con el objetivo de poner fin a su mala racha, ha estrenado este martes Todo es mentira, apuesta capitaneada por Risto Mejide y con Marta Flich, Itziar Castro, Elsa Ruiz, Miguel Lago y Antonio Castelo como colaboradores.
A mediados de diciembre, cuando el programa se presentó oficialmente en el plató de Sálvame, el publicista afirmó que la premisa de este nuevo espacio era “atacar la mentira con el arma más poderosa que existe, el humor”. Y visto el estreno, uno tiene la sensación de que ha habido más de lo primero que de lo segundo. Porque sí, la mentira ha sido atacada, pero no con la gracia que podía esperarse. Y no precisamente por falta de entrega.
Los chistes se han sucedido durante la hora y media de emisión, pero pocos de ellos han conseguido el efecto esperado. Como tampoco han evitado que este debut haya ido de más a menos, siendo los mejores minutos los de su arranque.
La sección de Marta Flich, lo mejor de este primera programa
Primero, porque Risto y su equipo no han dudado en hacer alusiones a su gran rival, Zapeando. “Hoy solo había una persona más nerviosa que nosotros, y era Frank Blanco”, ha comentado Castelo. “Podemos fichar a Bisbal, ya que Zapeando tiene a Chenoa”, ha bromeado a continuación Marta Flich, a su vez responsable de la mejor sección de este primer programa.
En “La maquina de la verdad”, la actriz y economista ha destapado con ritmo y acierto distintos clickbaits, dando así lugar a una sección ideal para los tiempos que corren y que ha funcionado notablemente como carta de presentación.
Lástima que con su final Todo es mentira haya perdido fuelle. “La verdad sí existe”, donde Elsa Ruiz busca -al menos en estas primeras entregas- un lugar para enterrar los resto de Franco, no ha causado el impacto de la sección anterior, pero al menos ha dejado una interesante entrevista con el único embalsamador vivo del dictador.
Sin embargo “Verdades como puños”, debate entre Lago y Castelo acerca de las propuestas de Vox sobre violencia de género, ha sido un batiburrillo sin gracia y de difícil seguimiento. Y “La verdad morada”, sección en la que Itziar Castro muestra el machismo del buscador de Google, no ha pasado de ser un curioso experimento lastrado por los constantes chistes de la actriz sobre su físico.
Risto ha terminado este estreno entrevistando a la 'madrina' Paula Echevarria. Y aunque no ha sido una entrevista especialmente novedosa, sí ha resultado interesante ver a la actriz comentando un vídeo suyo respondiendo a una reportera del corazón en Atocha, explicando además lo que ocurre una vez se apaga la cámara.
Un rival para Zapeando...parecido a Zapeando
Más allá de esto, Todo es mentira ha hecho gala de algunos tics propios de Zapeando. Risas enlatadas, colaboradores encorsetados y demasiado sujetos al guion, un presentador que pasa casi desapercibido y chistes por pulir han sido la norma en estos 90 minutos de emisión. No es de extrañar, por tanto, que las comparaciones entre ambos formatos se hayan acumulado en Twitter.
Y aunque plantar cara al programa de laSexta pasa por ser una de las grandes metas de esta nueva apuesta de Cuatro, parecerse a él no parece la mejor forma de conseguido. Y menos cuando compites contra un formato con casi 1.300 emisiones a sus espaldas.