El cuarto debate de Pesadilla en El Paraíso 2 desveló los porcentajes ciegos de las dos nominadas de la semana: Mar y María José Galera. Se reparten los votos con un 47% y 53% pero sin saber cuál es de cuál.
Kiko Jiménez acudió a plató, tras convertirse en el cuarto expulsado del reality y lo hizo montado en un toro mecánico junto a Maite Galdeano. Allí hizo balance de su experiencia.
Todo ello en una noche que arrancó a ritmo musical, con Sandra Barneda animando a todos los colaboradores a danzar. Al no conseguirlo con algunos, ella misma confesó lo siguiente: “Hay que bailar, antes tenía mucho complejo de bailar y ahora lo recomiendo. Bailo hasta en la ducha, me da igual que baile mal, hay que bailar”.
Las emotivas sorpresas de las nuevas nominadas
Como viene siendo habitual en el reality, cada semana acuden seres queridos de los nominados a la granja. Así, la primera en tener su sorpresa dominical fue Galera.
La ex gran hermana no dejaba de temblar ante la posibilidad de tener una visita. Algo que se cumplió al ver entrar a una de sus hijas que corrió a abrazarla. La concursante no pudo reprimir las lágrimas de agradecimiento y emoción.
El programa también recordó que Galera había perdido a una hija de 17 años hace tiempo y muchos la calificaron de luchadora y madre coraje. En la granja, ella misma explicó que sus dos hijas vivas le daban eran sus razones para seguir adelante.
Mientras que Mar también se alegró con la visita de su madre, a la que lamentó no decirle “te quiero” todas las veces que debería. Por lo que aprovechó para ser muy cariñosa.
Pero no fue su única sorpresa, también le dejaron leer una carta que le enviaba su padre, con el que hace años que no tiene relación. Él asumía toda la responsabilidad del distanciamiento y añadía: “Me gustaría empezar una relación de padre e hija”, algo que ella aceptaba.
Kiko Jiménez, en plató: “He disfrutado como nunca”
Kiko Jiménez llegó a plató tras ser el expulsado en su tercera nominación. Aún así, hizo un balance muy positivo de su paso: “Ha sido increíble, he disfrutado como nunca. He aprendido a valorar muchas cosas, he aprendido a madrugar, a tener responsabilidad y a cuidar un montón de animales”.
También negó que participar junto a su suegra fuera negativo: “Me ayudó mucho entrar de la mano de Maite, porque se me rompieron todos los esquemas. Con ella cada día era una aventura diferente. Me he reído como nunca”.
Preguntado por la razón de estar fuera: “Creo que ha sido agotamiento del público. La gente se ha cansado de que esté nominado cada semana, no me han dado tregua, y al final el concurso se estaba convirtiendo en algo aburrido con la misma trama”, sentenció.