Juego de Tronos se despidió esta madrugada con un nuevo gazapo en su historial. Concretamente, el segundo de esta temporada final tras el visto en el episodio 8x04, cuando Daenerys apareció junto a un café de Starbucks.
En esta ocasión no ha sido un vaso sino dos botellas de agua la que se han colado en plano, tal y como han alertado algunos seguidores de la serie en redes sociales. Este gazapo doble en cuestión ocurre en una de las últimas escenas del capítulo, cuando Arya, Sansa, Tyrion y otros personajes principales están celebrando una reunión. Es en ese momento cuando la cámara apunta, en planos diferentes, a Sam y Davos, que aparecen sentados junto a, sí, unas botellas de agua.
Aunque los personajes interpretados por John Bradley-West y Liam Cunningham tapan parte de las mismas con sus piernas, no consiguen ocultarlas por completo, dejándolas así a “simple” vista. Y decimos “simple” porque, en realidad, es difícil ver las botella de primeras. Aun así, una vez sabidos los gazapos y detenida la imagen, no cabe duda de que, efectivamente, dos botellas de agua se colaron en una de las escenas clave del desenlace de Juego de Tronos.
Y no unas botellas cualquiera sino unas de origen español, pues esta secuencia se rodó en el Conjunto Arqueológico de Itálica, situado en Sevilla.