Albert Sagalés, responsable de coproducciones y productor ejecutivo de Diagonal TV, nos atiende cortésmente entre encuentro y encuentro durante Conecta FICTION, la feria televisiva celebrada del 19 al 22 de junio en Santiago de Compostela. Pese a los múltiples compromisos y reuniones programadas, se toma la conversación con calma, abundando en los temas que le planteamos. No elude las cuestiones que pudieran considerarse más espinosas, las que tienen que ver con las prácticas y lugares comunes del negocio: en las fechas que esta charla tuvo lugar, estaba aún reciente la decisión de Antena 3 de interrumpir una semana la emisión de La catedral del mar, tras el “pilla-pilla” que mantenía con Telecinco.
Aunque midiendo sus palabras, el productor catalán diagnostica los efectos secundarios que la contraprogramación causa a la ficción española, del mismo modo que se muestra crítico con las dinámicas de producción que sigue manteniendo el modelo de consumo lineal, con los sempiternos episodios de 70 minutos: “Los canales de streaming ya no los quieren. Las televisiones lineales deberían hacer el ejercicio de reflexionar, pero siguen en sus trece”. O seguían, dada la celebrada decisión anunciada días después pr Atresmedia, grupo con el que Diagonal TV mantiene una saludable relación (ahí están la mencionada Catedral o la próxima Matadero, de la que nos anticipa las pretensiones narrativas de una futurible segunda temporada, siguiendo el patrón antológico de Fargo), de pasarse al estándar de los 50 minutos.
Enmarcada nuestra cita en el congreso de coproducción, la tertulia pasa de lo nacional a lo internacional con facilidad. “Desde una perspectiva de productora independiente, estamos mejor gracias a las plataformas”, asevera, dejando claro las buenas relaciones de su compañía con Netflix -para la que producen también el nuevo filme de Isabel Coixet-, aunque también detecta que “algunas plataformas se equivocan con el enfoque y otras lo tienen mas claro”.
Para la industria española, este escenario no había sido demasiado explorado hasta la fecha. ¿Cuáles son los principales desafíos que una productora como Diagonal TV se enfrenta al expandirse? ¿Cambia el flujo de trabajo?
El trabajo para una productora como Diagonal no cambia sensiblemente. Es igual que hace diez años que actualmente. Encargamos guiones y recibimos propuestas de gente de fuera. La literatura sigue siendo una de las principales fuentes de inspiración. Opcionamos unas tres novelas al año, y nuestra track record nos indica que vamos por el buen camino, porque La catedral del mar es una adaptación, igual que lo es la nueva película de Isabel Coixet y otras producciones que estamos haciendo en Cataluña... El trabajo no varía. Lo que si varia mucho es el mercado.
El mercado televisivo ha cambiado muchísimo. Supongo que es un tópico, pero la irrupción en España de las cadenas de streaming están revitalizando mucho las posibilidades de producir. Tanto Movistar, Netflix, Amazon, HBO y Sky, como Apple, Google y Hulu que están por venir. Además, estas plataformas están requiriendo cada vez más contenido y de mayor calidad, como vemos. Algunas plataformas, a mi juicio, se equivocan con el enfoque y otras lo tienen mas claro, pero se ha abierto un mercado importante y esto está bien. Más aún porque aunque en España ha habido financiación televisiva por parte de TVE, pero en Televisiò de Catalunya ha pasado por una crisis grave durante el último año y hasta junio no ha podido precomprar ni invertir en ficción propia.
Desde el punto de vista de una productora independiente como es Diagonal TV, que trabajamos desgraciadamente poco en Catalunya pero mucho en España, estamos mejor gracias a las plataformas. Estamos trabajando con Netflix, una empresa de nuestro grupo (Zeppelin TV) está trabajando con Movistar, y estamos desarrollando bastantes cosas en el grupo actualmente.
Al entrar nuevos actores internacionales en el proceso, ¿cuesta más tiempo sacar adelante un proyecto?
No, los tiempos siguen siendo los mismos. Cada proyecto tiene su tiempo de desarrollo, si es una miniserie de ocho episodios se requiere más tiempo que si fuera una tv-movie. Pero si me preguntas por tiempos de desarrollo, diaria que no ha cambiado.
¿En qué proyectos trabaja actualmente Diagonal?
Estamos en pleno desarrollo de varios proyectos pero por cuestiones de confidencialidad no se puede decir nada. Algunos son sobre novelas que tenemos... De lo que te puedo hablar es de lo que tenemos en el presente.
Hablemos pues de 'La catedral del mar', que se encuentra ya en la recta final de su andadura en Antena 3, y con Netflix como ventana para la expansión global. ¿Qué balance hacen desde Diagonal TV de su impacto, a tenor de las cifras de audiencia?
Hace un año estuvimos en la primera edición de Conecta FICTION hicimos una presentación de la serie, que ya estaba acabada, y teníamos en la audiencia a Juan Mayne de Netflix. De hecho, fue Netflix [nota: de la que el mencionado ejerce como director de adquisicones] la primera en interesarse por el proyecto en 2015, cuando aún no estaba instalada en España ni había encargado sus primeros originales. Fueron los primeros interesados en el proyecto junto con Antena 3.
El punto de partida era bueno, porque la novela había viajado mucho. Fue un enorme esfuerzo de producción, Antena 3 ha hecho una campaña sensacional y los resultados de audiencia son maravillosos. Tenemos una audiencia fiel, y la curva de audiencia es sensacional.
En cualquier caso, la serie se ha visto afectada por la contraprogramación y por el juego de ajedrez que enfrenta a Atresmedia con Mediaset, y que llevó a que la emisión se detuviera una semana. ¿Cómo veis vosotros la situación y cómo afecta a productos ambiciosos como este?
Me parece horrible. Pero no puedo juzgarlo. Lo que está sucediendo con las cadenas privadas en España no hace ningún bien a nadie. Esta contraprogramación no ayuda, es contraproducente.
¿Esta contraprogramación de la que hablamos y que es tan común no evidencia también que la programación lineal se queda un tanto obsoleta como ventana para los productos de ficción?
Obsoleta en algún sentido, sí. Por ejemplo, que se sigan encargando episodios para el prime time de 70 minutos... Como es evidente, los canales de streaming ya no los quieren. Las televisiones lineales deberían hacer el ejercicio de reflexionar, pero siguen en sus trece.
En cualquier caso en España el consumo de televisión lineal sigue siendo el mayoritario. No se qué cuota del mercado tiene las televisiones en streaming, entre otras cosas no las publican. Yo la desconozco.
¿Ese hermetismo que siguen como política os influye de alguna manera a quienes trabajáis haciendo series para ellos, al saber a ciencia cierta el funcionamiento real?
No, que sigan encargando cosas ya significa algo. Pero, cuidado, sí que tenemos feedback de Netflix. Lo que nos comunican desde Netflix es que la ficción española cada vez funciona mejor internacionalmente. Esto es un hecho. Y muy bueno.
Matadero pendiente de estreno, que recuerda mucho a 'Fargo', ¿tiene potencial para funcionar como una antología? No se si habéis planteado algo..
Sí, tenemos planteada ya una segunda temporada, siguiendo con la adaptación de Fargo. Esta vez no ambientada en Castilla sino en otra zona de España. Pero lógicamente estamos pendientes de emisión en septiembre de la primera y si va medianamente bien esperamos que haya una segunda.
Es inevitable preguntar por La República. Fernando López Puig de TVE nos mostró su optimismo y predisposición a sacarla del cajón. ¿Qué sabéis vosotros? ¿Esperáis que vea la luz por fin, aprovechando el cambio en la corporación pública?
Es un tema recurrente. No tenemos ni idea. Y es una lastima porque es una serie magnifica. No son tiempos para hablar de República [ríe].
Por último, para cerrar de forma circular, queremos preguntar sobre la implicación de Diagonal TV en una producción internacional de Telemundo que tiene, además, a Netflix como valedor. Hablamos de La Reina del Sur, de cuya participación supimos hace poco. ¿En qué consiste esta entrada en la serie?
Ese fue un servicio que se hizo para Telemundo en la segunda temporada. Parte de los primeros capítulos ocurren en Europa (en Moscú, La Toscana, Bucarest y Málaga) y tuvimos la suerte de llegar al acuerdo con ellos. Acabó siendo algo más que solo un servicio, puesto que nos pidieron si podíamos sugerirles un actor, y acabamos poniendo a Jesus Castro en un papel pequeño y a Aitor Luna como otro más protagonista. Ha sido una experiencia magnifica para Diagonal y Telemundo, para quienes ha sido muy complicada la producción. Estamos muy contentos.