A base de reportajes y conexiones en directo, Boro Barber se ha convertido en uno de los reporteros más reconocidos e identificables de la televisión española.
Empezó su trayectoria televisiva nacional en el grupo que actualmente le acoge, Mediaset, en programas como Rojo y Negro, El programa de AR, y La Búsqueda. Luego cambió de banda para seguir curtiéndose en Atresmedia con Expediente Abierto y Equipo de investigación, y regresó hace dos años y medio para ser uno de los reporteros de 'En el punto de mira' en Cuatro.
El programa está de enhorabuena porque este jueves se convierte en centenario, y aprovechamos la ocasión para hablar con Barber sobre qué veremos en esta entrega, cómo ve el futuro de 'En el punto de mira' y el suyo propio, y saber cómo logran emitir semanalmente desde hace ya más de un año, sin descanso.
También cuestionamos al periodista sobre las amenazas y agresiones que reciben mientras hacen su trabajo, y le pedimos su opinión sobre las coberturas televisivas de casos como el de Julen, así como del cambio de rumbo de Cuatro en cuanto a la actualidad eliminando sus informativos pero apostando por el magacín 'Cuatro al día'.
Celebráis el primer centenario con un especial sobre el futuro. ¿Qué vamos a ver?
Nos hemos centrado primero en saber si es cierto o no que viviremos más años. Algunos científicos aseguran que en el 2045 podremos derrotar a la muerte, y para saber si es verdad o es mentira nos hemos rodeado de los que más saben, y que nos expliquen qué posibilidades reales hay.
También nos hemos centrado en la criogenización, ahora que está muy de actualidad porque en Valencia querían abrir el primero centro en Europa. Nos hemos desplazado hasta Arizona para saber qué es exactamente, cómo funciona, y analizar las posibilidades reales que hay, qué dice la ciencia.
¿Cómo ves el futuro de 'En el punto de mira'?
Estamos muy contentos. Parece que fue ayer cuando empezamos, recuerdo que nos juntamos en un despacho para ver qué temas podíamos hacer, qué le podía interesar al espectador, qué reportajes haríamos y cómo los haríamos... y ya llevamos 100 programas. Aspiro a hacer muchísimos más, y veo posibilidades reales, por supuesto.
¿Y el tuyo a nivel personal, por dónde te gustaría que avanzase?
La verdad es que me encanta lo que hago. Me encanta viajar, conocer a gente, conocer sitios y grabar reportajes. Disfruto haciendo eso, y de momento no me planteo otra posibilidad. Estoy abierto a todo, por supuesto, pero hago lo que me gusta y no pienso en otra opción.
Entre 'En el punto de mira' y 'El verano en el punto de mira', lleváis emitiendo una entrega semanal desde el 11 de diciembre de 2017 sin descanso. ¿Cómo se logra?
Con muchísimo nivel de trabajo y gracias a que además de nosotros tenemos un equipo de 50 personas, y todos estamos trabajando muchísimo para emitir todas las semanas y hacerlo con unos criterios de calidad que consideramos imprescindibles. Respondemos a qué se está preguntando el espectador en la calle en cada momento, qué habla la gente en el bar, nos acercamos a lo que le preocupa a la gente... Creo que en ningún momento hemos perdido esa perspectiva, y que siempre logramos contestar a todo eso que el espectador quiere saber. Tenemos carrete para rato.
Por esa razón sois un formato “comodín” para Cuatro. ¿Cómo os sientan los cambios de día y competencia?
La competencia es dura cualquier día de la semana en el prime time. Pero creo que sirve para fortalecerte y hacer un mejor programa, de más calidad e investigar mejor. En cuanto a los días, lo cierto es que es una decisión empresarial que tampoco influye en nuestro trabajo diario, que al final es investigar y responder las preguntas que se hace el ciudadano.
Habéis sufrido muchas amenazas e incluso agresiones. ¿Por qué la prensa se sitúa en el punto de mira?
Es cierto que nosotros hacemos investigaciones y siempre tratamos de mostrar la cara B de determinadas circunstancias metiéndonos donde no quieren que nos metamos y preguntando a quien no quiere ser preguntado. Y en esas situaciones, sí que te enfrentas a episodios un poco peculiares. Llamar a esas puertas a las que no quieren que llames siempre conlleva ciertas situaciones “complicadas”, ya no de riesgo, pero un poco peculiares. Al final nosotros lo grabamos todo, la gente lo sabe, y eso nos cubre. Estamos en un país seguro, afortunadamente [ríe].
¿Qué te parecen las coberturas televisivas de casos mediáticos como el de Julen?
Yo mantengo que el objetivo de los periodistas no es contarle a la gente lo que nos gustaría que la gente sepa, sino contarle a la gente lo que quiere saber. En el momento en que un caso está de mucha actualidad, que todo el mundo está hablando de eso, todo el mundo quiere saber, se levanta y busca en Google una palabra... es un hecho claro de que a la gente le interesa ese tema. Y nosotros tenemos que contarle a la gente lo que quiere saber. Me parece que entre la teoría y lo que al final buscamos todos cuando vemos los medios de comunicación, hay una distancia importante.
A vosotros se os ha alabado por reportajes como el de Hazte Oír, y también se os ha criticado por ir a buscar a la familia de Ana Julia Quezada a República Dominicana. ¿Qué opinas?
Siempre que grabamos un reportaje, y tenemos la ventaja de ser un programa que nos permite una elaboración y un estudio previo de qué y cómo lo queremos enfocar, estamos muy convencidos de cómo queremos sacar ese reportaje, de cuál va a ser el resultado final. Y estoy convencido de que siempre es un resultado de calidad. Críticas puede haber siempre, pero estamos muy orgullosos del trabajo que hacemos.
¿En qué quedó el anuncio de denuncia de Ana Julia Quezada? ¿Os llegó?
No, en absoluto. Eso fue un rebote. Al final fuimos a investigar en los orígenes, en su pasado, y esto es un rebote y una amenaza absolutamente infundada. Tan infundada que no se ha transformado en ninguna denuncia ni en nada similar. Cuando todo lo tienes contrastado y todo lo que cuentas es real, no te dan miedo las denuncias ni absolutamente nada, porque ante la verdad, ve a los tribunales que quieras que no tienes opción.
Sois una de las pocas ventanas a la actualidad de Cuatro. ¿Cómo valoras la llegada de otra como es 'Cuatro al día'?
La valoro bien. Al final la apuesta de la cadena es clara por los temas de actualidad y de investigación. Puedo hablar por mi experiencia propia, que todos los programas que llevamos y estoy seguro que todos los que vamos a hacer, hay una apuesta clara de la cadena por afrontar temas de actualidad, por responder a las preguntas de los ciudadanos. Eso lo estamos celebrando ahora mismo porque llevamos 100 programas, y al final 'Cuatro al día' pasa a ser un contenedor con muchísima actualidad en el que seguir tratándola. No conozco los entresijos de cómo va a ser el proyecto, pero desde luego sé que va a centrarse en la actualidad y en la información y que nos vamos a enterar absolutamente de todo.
¿Y qué opinas del histórico cierre de 'Noticias Cuatro'?
Es una decisión que responde a criterios empresariales. Una decisión de la cadena, que entiendo que sus motivos tendrá. Lo cierto es que al final vamos a seguir teniendo información y actualidad.