Ideas contrarias

Así estropeó la política una cita en 'First Dates': “A mí me encanta el señor de la coleta, si fuera hijo mío… ”

Paula Hergar

14 de marzo de 2022 23:40 h

Gregorio y Marga llegaron a First Dates buscando un compañero con quien compartir su vida. Ambos conectaron al verse y descubrieron que tenían un nivel intelectual parecido, así como intereses similares, como la política. Sin embargo, no tenían las mismas ideas en ese campo.

Él, al tener sangre suiza, señaló en varias ocasiones que lamentaba que España no funcionara igual que el país nórdico: “Allí tenemos un 2% de paro y aquí más de un 20%”, aseguraba y así se lo hizo saber a su cita. Que no estuvo tan de acuerdo con esas conclusiones.

“Serías capaz de decirme un dirigente que te mereciera el diagnóstico de 'bueno'?”, preguntaba ella pero él negaba que hubiera alguno que se mereciera tal adjetivo. Algo que Marga le discutió: “Tenemos por primera vez en España un presidente que habla perfectamente inglés y no dice tonterías y barbaridades como un señor bajito...”, aseguró refiriéndose a José María Aznar.

Sin embargo, Gregorio explicó que no estaba conforme con Pedro Sánchez porque no veía que el país funcionara bien : “Yo con ese señor no estoy de acuerdo y con el de la coleta, menos todavía”, zanjó. A a la vez que Marga se echaba las manos a la cabeza: “A mí me encanta, si fuera hijo mío… a mí me encanta el señor de la coleta, que se llama Pablo Iglesias”.

Y es que, el soltero alegaba que lo que quería “es que España vaya perfectamente”, mientras Marga contestaba con ironía: “Y yo lo que quiero es ser Claudia Schiffer, pero lo he intentado y no ha sido posible, ¿entiendes? Es que las cosas son como son, tenemos que moldear a 47 millones de españoles muy variopintos”.

Unas respuestas que disgustaron a Gregorio: “Tiene cultura pero lo estropea con el carácter, porque es muy recta, un poquito dictadora”, dijo en los totales. Mientras Marga explicó a cámara que le gusta “la política con cerebro, inteligencia e interlocutores varios”. Por lo que prefirieron cambiar de tema y hablar de viajes, algo menos polémico.

Como era de esperar, en la decisión final, ambos coincidieron en que la cita había sido interesante pero que no repetirían.