Las actrices Felicity Huffman (American Crime) y Lori Loughlin (Padres forzosos) han sido arrestadas en la mañana de este martes por las autoridades estadounidenses por su participación en una trama de sobornos universitarios, informa Deadline. Las conocidas actrices habrían pagado a personal de universidades de élite a cambio de que sus hijos fueran admitidos.
Junto a ellas han sido detenidas también otras 11 personas en Los Ángeles que, de acuerdo a las investigaciones del FBI, también están involucradas en esta intriga, aunque la investigación señala a un total de 33 padres y otras 17 personas dentro de esta trama.
Todas ellas pasarán ante el juez donde se les imputarán cargos de conspitración y fraude. Estos delitos podrían acarrear condenas de entre uno y cinco años de cárcel.
Sus hijas fueron admitidas gracias a cuantiosas donaciones
Huffman y Loughlin son las dos personalidades famosas dentro de esta trama, que tenía por objeto conseguir la admisión de jóvenes estudiantes a centro de alto nivel como Georgetown, Stanford, UCLA y Yale. Normalmente son las universidades o una casa de estudios las que deben aceptar la solicitud del estudiante de turno, siendo esta una parte clave en la formación del alumno desde que está en Bachillerato.
Para facilitar el acceso, estos padres habrían pagado millones de dólares en concepto de “donaciones” a entrenadores de equipos de la llamada Liga Yvy (que engloba centros de élite deportiva y académica) para que aceptaran a los muchachos en sus equipos, falseando los exámenes previos, y recibieran así una vía directa para entrar en las universidades, sin ser atletas. Ninguno de las facultades había participado de esta trama, habiendo solo un trabajador de administración de una de ellas involucrado.
El matrimonio formado por Huffman y su marido, el actor William H. Macy (Shameless) realizaron una contribución de 15.000 dólares para conseguir que su hija mayor lograra una plaza. Así, su prueba de acceso vio un aumento considerable de la calificación que permitió su entrada en una universidad. Huffman luego trataría de repetir la jugada con su hija menor, pero acabó reculando.
Por su parte, Loughlin y su esposo pagaron diversos sobornos, por un valor total de medio millón de dólares, para que sus dos hijas entraran en la universidad de South Carolina.