Fernando González “Gonzo” pasó este sábado por el plató de 'laSexta Noche'. Y entre otras cosas, el reportero de 'El Intermedio' valoró la denuncia que la Fundación Francisco Franco interpuso contra su programa por un sketch en el que Wyoming y Dani Mateo “exhumaban” entre bromas un falso cadáver del dictador.
“Entiendo que haya gente que no entienda estas bromas. Entiendo menos que haya gente que crea que lo va a denunciar y que va a ganar”, dijo al respecto el periodista gallego, que recordó que situaciones como ésta, con denuncias de por medio, no son nuevas para ellos. “Esto nos ha pasado varias veces en 'El Intermedio', y cuando llegamos a la situación de hacer un sketch así, sabemos qué podemos hacer, qué no podemos hacer y qué es lo que pretendemos haciendo ese sketch”.
Por si había dudas, Gonzo dejó claro que seguirán haciendo bromas de este estilo: “Nos quedan ganas porque tenemos derecho”. Y las seguirán haciendo porque, detrás de cada denuncia, se quedan con la sensación del trabajo bien hecho: “Creo que fue la Fundación Franco la que nos puso la denuncia a raíz de este sketch. Yo siempre digo lo mismo: una medalla más que nos ponemos”.
Con respecto a la reacción de los franquistas, el periodista contó una ánecdota personal. Un simpatizante de Franco le paró por la calle y le dijo que no se podía “jugar con los muertos”. Gonzo, tras esta crítica, le preguntó si él era franquista, a lo que el hombre respondió que “hasta la muerte”. “Cómo puede ser franquista cuando Franco jugó con 20.000 o 30.000 cuerpos que estaban en las cunetas y ordenó llevarlos al Valle de los Caídos (...) Es que aquellos eran muertos de verdad. Esto era un muñeco”, fue su respuesta.
Preguntado por Hilario Pino -ayer al frente del programa en sustitución de Iñaki López, Gonzo opinó que Franco “no debe estar en un edificio público”, y entiende “que la familia quiera buscarle un sitio”, siendo la catedral de La Almudena el lugar escogido para dejar sus restos si es exhumado.
“Si la Iglesia y el arzobispado de Madrid consideran que no es molesto para la Iglesia el tener ahí los restos del dictador pues oye, yo no soy católico, entonces esas decisiones ni me van ni me vienen”, afirmó después el reportero, que vio el lado positivo de esta cambio: “Quien quiera honrarlo se ahorra 120 kilómetros desde el centro de Madrid”.