Jenaro Castro, director y presentador de “Informe Semanal” en La 1 de TVE, ha escrito una columna de opinión en el diario El Mundo titulada “Un lazo blanco para RTVE” en la que critica la postura del Consejo de Informativos y asegura que hay una “mayoría silenciosa” de trabajadores que rechazan “el linchamiento permanente”.
Según su visión, la realidad dentro de TVE es que “una amplia mayoría adopta una posición de discreta neutralidad frente a otra parte más ruidosa mientras los políticos se ponen de acuerdo”. Todo ello, unos días después de que todos los trabajadores de la Corporación viviesen su tercer “Viernes negro” y mostrasen en las redes sociales esa iniciativa de visibilización.
En el texto, Castro considera que esas protestas de los propios trabajadores de la Corporación son en realidad “campañas de propaganda y descrédito que se vierten con alevosía, premeditación e impunidad” sobre RTVE.
La denuncia de los trabajadores de RTVE se produce porque el PP está forzando el bloqueo de la renovación del Consejo de Administración y la Presidencia de la Corporación pública. Una ley que ha sido acordada por todos los partidos de la oposición , pero que el Gobierno está impidiendo aplicar a través de la presidenta del Congreso, Ana Pastor, para perpetuar el sistema de mayoría simple que le permite controlar RTVE.
Pese a esa exigencia de los trabajadores de que RTVE vuelva a ser independiente, para Jenaro Castro lo que en realidad buscan estas protestas es “apropiarse de los valores periodísticos de la neutralidad, la pluralidad y la objetividad cuando en realidad representan un determinado posicionamiento ideológico”.
Ya comparó al Consejo de Informativos con ETA
Jenaro Castro, que a finales de 2016 ya comparó al Consejo de Informativos con ETA, por lo que el órgano pidió su dimisión, dirige y presenta uno de los programas que más informes del Consejo de Informativos se ha ganado por sus constantes manipulaciones.
Informe Semanal ha sido denunciado ante la Junta Electoral por sus reportajes sobre Catalunya, llegando a señalarse 7 motivos distintos de su “vulneración en TVE del pluralismo informativo”. Diferentes informes han documentado los muchos ejemplos que han hecho que el Consejo de Informativos pidiese su cese como director de Informe Semanal alegando que “no está capacitado”.
El último ejemplo de manipulación llevó al presidente de RTVE José Antonio Sánchez a tener que dar explicaciones en sede parlamentaria sobre el motivo por el que no se abordó en el programa informativo durante casi un mes el escándalo del máster de Cifuentes, y cuando se hizo se contó de forma parcial y sin citar al medio que destapó el caso: eldiario.es.
Pese a todas esas denuncias, es Jenaro Castro el que acusa al Consejo de Informativos de “pretender una televisión hecha a la medida de su pensamiento militante y sus aspiraciones personales”, recordando él que “la verdad es que RTVE debe ser de todos, y no de unos pocos” y defendiendo que deber ser “contraria al concepto populista, antisistema y rupturista de la información”.
Según Castro, las protestas de los trabajadores intentan “criminalizar a una determinada dirección”, algo que rechaza porque “lo que se consigue es desprestigiar RTVE para lograr el objetivo del control al servicio de unos determinados intereses políticos, empresariales y mediáticos”.
Defiende a la “mayoría silenciosa” de RTVE
El director de Informe Semanal también asegura que hay un “doble rasero” con respecto a las cadenas autonómicas públicas: “Para ellas no se utilizan ni la misma vara de medir ni la lupa que con TVE”.
Para Jenaro Castro, todos los anteriores modelos “pretendían ser el entierro de la televisión pública española”, y celebra que sin embargo “lejos de morir está resucitando con liderazgo de audiencia”.
Al final de su texto, el director de Informe Semanal sentencia que sobre RTVE “hace falta un pacto de Estado por verdadero consenso político”, diciendo que la nueva Ley de 2017, aprobada por todos los partidos y bloqueada por el PP, en realidad “se ha demostrado por ahora ineficaz y de incierta aplicación tanto jurídica como política”.
Jenaro Castro acaba haciendo una defensa de “esa mayoría silenciosa que porta en la solapa imaginaria del trabajo diario, la honestidad, la lealtad y la decencia el lazo blanco de una televisión pública necesaria, integradora y compartida”.
El Consejo de Informativos responde: “Es indecente”
Vertele se ha puesto en contacto con el Consejo de Informativos para conocer su valoración de este escrito.
Sobre el término usado por Jenaro Castro, explican que “el concepto mayoría silenciosa está asociado a tiempos muy oscuros en los que las dictaduras o regímenes totalitarios lo utilizaban para legitimarse: como no había protestas porque había represión, se apuntaban que todo el que no protestaba estaba de acuerdo con ellos”, señala un portavoz del órgano de los trabajadores.
Añaden que esto es “indecente” desde un “punto de vista intelectual” y que “no respeta los valores de la democracia” y recuerdan que Jenaro Castro ha sido protagonista de “documentadas manipulaciones”.
“Nosotros podemos decir los apoyos que tenemos porque nos eligen los profesionales de la información”, afirman, y recalcan que los Consejos de Informativos “no se rigen por ningún interés político”. “Somos representantes de los profesionales, todos nuestros informes demuestran vulneraciones deontológicas del Estatuto de la Información y en ningún caso lo hacemos con intención política”, afirman.
“Tenemos un referente que es el Estatuto: en eso y solo en eso somos militantes”, insisten.
“Eso es falso y lo sabe”
Desde el Consejo creen que con estos argumentos “intenta justificar todo lo que han estado haciendo” y que para ello “solo pueden hacer una cosa: acusar a los demás de que quieren hacer lo mismo con otro signo político”. “Eso es falso y lo sabe”, añaden.
Recuerdan que entre los trabajadores hay una pluralidad de ideas y que la actual dirección ha apartado a gente “no en función de la ideología” sino de “la docilidad para cumplir sus órdenes”. “Todo aquel que pone por delante el cumplimiento del Estatuto de la información ha sido desplazado y sustituido”, remarcan.
“Aquí no hay trincheras ideológicas, solo la que han abierto la dirección: se han metido en ella y están intentando señalar a todos los demás como enemigos mientras para el resto solo hay una trinchera, que es profesional y en defensa del periodismo”, concluyen.