Jorge Javier Vázquez se ha hecho eco esta semana de la información publicada en algunos medios que apuntaba a un supuesto veto hacia Belén Esteban dentro de RTVE después de que su nombre sonase como una de las posibles concursantes de Baila como puedas, talent que llegará muy pronto a La 1, tal y como informó verTele en exclusiva, con Anne Igartiburu como presentadora.
A través de su blog de Lecturas, el catalán repasa los presuntos hechos: “La historia es más o menos así: una productora quería fichar a Belén Esteban para ser jurado de un concurso de baile, pero aseguran que la presidenta de RTVE se ha negado. Se habla de la 'salvamización' de la cadena estatal como algo despectivo cuando si haces un programa de entretenimiento lo más lógico es acudir al caladero de Sálvame: son valores seguros. Pero claro, que cómo vamos a pagar con nuestros impuestos a gente como Belén”, se pregunta.
Para Jorge Javier este es “un argumento tan idiota que se cae por su propio peso”: “También habrá televidentes que paguen sus impuestos que deseen ver en la televisión de todos a Belén, digo yo”, opina, asegurando que el hecho de no contratarla “tiene un nombre: prejuicio”. “Entiendo que la gente se echara las manos a la cabeza si se la fichara para sustituir a Franganillo pero veo muy adecuado que Belén esté en un concurso de baile”, comenta con sorna, haciendo referencia al salto que el expresentador del Telediario ha dado a Telecinco, siendo reemplazado desde el pasado lunes por Marta Carazo. Vázquez recuerda entonces que Esteban “se alzó con el triunfo en el Más que baile de Mediaset frente a Edurne”, en aquella polémica televisiva del año 2010.
Jorge Javier pide la vuelta de Belén Esteban a TV
El todavía presentador de Telecinco pide a RTVE que recapacite: “Espero que enmienden la equivocación fichándola para MasterChef. Nadie más que ella merece estar en un programa de cocina. ¿O nos hemos olvidado de las impagables recetas que nos brindó durante la pandemia? Porque yo no he logrado borrar de mi cerebro uno de los ingredientes que Belén Esteban enumeró para confeccionar una tortilla de patata: una tortilla de patata. Sí, lo escribo. La princesa del pueblo comunicó en directo con todo su papo que para hacer una tortilla de patata era necesario una tortilla de patata. Eso es entretenimiento en estado puro”, señala, remontándose a las televisadas recetas que la de San Blas realizó desde su casa durante el confinamiento.
“Quiero a Belén en el programa de baile de La 1, en Maestros de la Costura y en MasterChef. Pero en MasterChef, dada su sabiduría, la quiero como jueza. Es que si nos ponemos puristas también habrá muchos chefs que digan: 'Ya está bien de que siempre cobren los mismos. No a los sueldos vitalicios'. Aunque si por mí fuera, a los puristas que les vayan dando. A saber la que podrían llegar a liar si me fichara RTVE”, imagina el catalán, pidiendo la vuelta de Esteban a la pequeña pantalla, a pesar de que la propia tertuliana llegó a asegurar que se retiraría de los medios con el final de Sálvame.
Jorge Javier aprovecha entonces para aclarar que, “en contra de lo que se está especulando, nadie se ha puesto en contacto conmigo para trabajar en la pública”: “Recordemos que se llegó a asegurar que yo aceptaba presentar el libro de Pedro Sánchez a cambio de fichar por la española. Pues ya se está viendo que no. Llegado el momento creo que ficharía solo por escuchar el lamento de los agoreros. Aunque fuera para hacer de chico del tiempo y poder anunciar con mis ojitos entrecerrados 'nubosidad variable en el corazón de los enamoradizos”, comenta con sorna.
El dardo de Jorge Javier a Ana Obregón
En su escrito, Jorge Javier no deja pasar la oportunidad de lanzar un dardo contra Ana Obregón: “Lo que pasa con Belén, fíjate, no pasa con Ana Obregón. A Belén la quieres ver. A Ana, no tanto. No es una opinión, es información: Ana Obregón vende más cuando Lequio habla de ella que ella misma en carne viva. Le está sucediendo lo mismo que a Isabel Pantoja: no hace falta que esté en un plató para generar contenido”, comenta el periodista, que cree que ambas “son personajes que venden más en ausencia que en presencia”.
“Aunque hay algo que diferencia a ambas: el futuro. A la Obregón la está penalizando su manera de gestionar las informaciones sobre la fundación de su hijo y, sobre todo, la constante exhibición/utilización de su hija/nieta. Se ha enredado de tal manera con ambas historias que la cosa solo puede ir a peor. Sin embargo con Pantoja creo que todavía hay una historia por escribir: la de la relación con sus hijos”, señala antes de desvelar un fortuito encuentro con Kiko Rivera en el aeropuerto.
“El final de esa historia está abierto y tengo la impresión de que será bueno. Dicen que la Pantoja se quita de encima Cantora y se vuelve a vivir a Madrid. Que sigue teniendo tirón como cantante es indiscutible. Que profesionalmente está desaprovechada, también. Quizás ha llegado el momento de que dé un paso al frente y decida confiar su carrera a alguien que le ayude a explorar territorios hasta ahora desconocidos. Me encantaría verla como actriz en una serie de televisión, por ejemplo. En realidad me gustaría verla trabajando más, relacionándose con desconocidos, disfrutando de una vida que todavía le puede dar muchísimas sorpresas”, sentencia.