Ni que fuéramos Shhh ha terminado la semana con un inesperado y jocoso crossover con La Revuelta. Pocos minutos después de haber concluido la primera hora de programa, el espacio de Fabricantes Studio recibía por sorpresa a Jorge Ponce, uno de los artífices del exitoso programa del access prime time de La 1.
Su visita servía para seguir alimentando una de las bromas recurrentes que se han establecido en el formato de la cadena pública: la de las continúas chanzas a costa del aspecto de Kiko Matamoros. Algo que comenzaron a hacer desde el comienzo de su andadura en TVE, y en cuyo juego acabó entrando el colaborador de Quickie, que comenzó a pedir dinero por el uso continuado de su imagen. En concreto, comenzó pidiendo “150 euros” tras aparecer una imagen suya durante la entrevista a Norman Reedus de finales de septiembre, y ha ido subiendo el acumulado.
Después de que este jueves, durante la visita de Mario Casas a La Revuelta, volvieran a emplear una foto de Matamoros tras someterse a una cirugía estética, Ponce se presentaba en las instalaciones del programa que emite Ten para un careo con el tertuliano. “Te recibo con los brazos abiertos”, decía Matamoros antes de descolgar el telefonillo. “Tenía muchas ganas de verte, para que me deis ya la panoja”.
Ponce, a Matamoros: “Es más divertido que denuncies”
“Son 1.650 euros. 11 menciones a 150 euros cada una”, señalaba con el cálculo específico. “Yo te los voy a vender a todos”, prometía Ponce, entrando en el juego clásico de Sálvame. “Te voy a decir quién está detrás de cada uno de los chistes”. Llegó a bromear con que “Broncano tiene un poco de diógenes porque viene de familia pobre”.
“Estoy supercontento de estar aquí”, exclamaba Ponce, que en realidad acudía a Ni que fuéramos a presentar su recién estrenada docuserie para Prime Video, Medina: El estafador de famosos. Pero para integrarse incluso llevó “merienda de supermercado” para comer con María Patiño y el resto de colaboradores de Ni que fuéramos. Sin embargo, el gag con Matamoros fue el hilo conductor.
“Haz el puto favor de arreglar lo mío”, le insistía este último, quejándose de su utilización como “hombre objeto” en La Revuelta, y reclamando la cantidad antes indicada. La sorpresa llegó cuando Ponce propuso una alternativa: “Yo creo que es más divertido que denuncies. Tú ve a muerte”.
“Entonces no voy a pedir 1.600, voy a pedir 16.500”, avisó Matamoros. “Denuncia, porque aparte sois expertos en esto. ¿Con una denuncia cuánto contenido nos tiramos haciendo?”, llegó a preguntar el productor. “Si lo pactamos antes, ¡no veas la que podemos liar!”, añadió el rostro de Ni que fuéramos entre risas.
Matamoros reconoció ser víctima de Medina, 'el estafador de famosos'
Lo más curioso de esta intervención fue que el propio Matamoros reconoció ser víctima de Medina, el sujeto al que se dedica el documental de Ponce.
“Fue hace dos años y medio. Había ido a la Milla de Oro. Bajo andando a coger un taxi en Serrano, iba con mi mujer, y de repente me aborda este señor. Me dijo: 'Hola, compañero... ¿Te acuerdas de mí que trabajaba en vuestro programa? No veas en qué situación estoy, tengo que ir al hospital a ver a mi hija, está tetrapléjica'. Y me conmovió. No me sonaba la cara, pero han pasado muchos cámaras y he estado en ochocientos platós, pero me lo creí. Le di 50 euros [...] Estuve días con la historia en la cabeza”, reveló.
Para que no quedara lugar a dudas, y volviendo a recoger las actitudes del mundo Sálvame, Jorge Ponce sacó su móvil para enseñarle a Matamoros, y fuera de cámara, la fotografía del individuo en cuestión, al que no se ve la cara en la docuserie, a fin de corroborar que era él. Por orden de David Valldeperas, director de Ni que fuéramos, el resto también fue viendo la imagen en el dispositivo del cómico.
Jugaron a 'Quién prefieres que se muera'
Y eso no fue todo, puesto que antes de la despedida, el programa le propuso el juego: “¿Quién prefieres que se muera?”. Ponce, junto al resto de contertulios, tuvo que decidir entre “matar” a María Patiño o Belén Esteban, a Kiko Matamoros o Kiko Hernández... Y también Grison o Broncano. El humorista no dudó ni un solo momento: “En lo profesional que se muera Broncano, porque así tengo más posibilidad [de ascender]. Pero a la vez Grison podría entrar ahí... Así que que se mueran los dos, por si en vez de ascender yo lo hace él”.