TVE estrenó este lunes Días de verano, su apuesta post-Juegos Olímpicos para cubrir el hueco de Las cosas claras de Jesús Cintora en La 1 hasta que la cadena inicie su nueva temporada ya en septiembre.
Antes de su arranque, la Corporación presentó este formato como un “magacín basado en la forma clásica de un talk show”, insistiendo en que “la tertulia huirá de la confrontación” y que hará “un repaso amable de las imágenes y de los protagonistas del día”, queriendo marcar distancias con el programa de Cintora.
Y sobre todo, desveló que su presentadora Inés Paz iba a estar acompañada cada día por cuatro colaboradores que irían cambiando. La cadena anunció algunos de ellos como Anabel Alonso, Gonzalo Miró y Marc Giró, pero explicó que se irían desvelando cada semana.
En su segunda entrega de este martes, Días de verano ha presentado a uno de esos fichajes, como también ha recogido la web de RTVE. Se trata de Julián Contreras, que según la misma Corporación pública “veraneará junto a Inés Paz varios días a la semana durante el mes de agosto”. En su primera aparición, el programa le ha rotulado como “RR.PP. en Bingo Copacabana (Móstoles)”.
Su presencia en el plató no sólo ha generado dudas sobre si es el tipo de colaboradores que debe tener un programa de la cadena pública, sino que su forma de presentarle a través del rótulo también pone en duda si no se trata de una forma de publicidad, que estaría prohibida en TVE al no ser un patrocinio.
Por el momento, el dato de estreno de Días de verano no ha sido muy halagüeño, puesto que en su debut este lunes el programa apenas reunió un 3.2% y 3.5% de cuota, conformándose con 162.000 y 325.000 espectadores en las dos mitades en las que se divide. Habrá que ver si este tipo de fichajes se convierten en un revulsivo para mejorar su audiencia.