Sálvame ha vivido este jueves 11 una escena que llevaba tiempo sin producirse: la coincidencia en plató de Carlota Corredera con Kiko Matamoros. De hecho, han transcurrido algo más de 3 meses desde la última vez que estuvieron juntos en el plató, el 3 de agosto.
El origen del conflicto estaba, como ha sido casi una norma en los últimos meses en Telecinco, en sus posturas con respecto al testimonio de Rocío Carrasco en Rocío, contar la verdad para seguir viva. Durante el tiempo en emisión de la docuserie, el tertuliano mantuvo una postura crítica con la hija de Rocío Jurado, que acusó de maltrato físico y psicológico continuado a su exmarido Antonio David Flores. Durante semanas, los desencuentros con otros compañeros han sido continuados, con Jorge Javier Vázquez y Corredera incluidos.
Esta, que se encargó de presentar los debates de la docuserie, ha sido por su parte firme en la defensa del programa y de lo relatado. Así, desde el verano ninguno de los dos habían estado a la vez en el plató. Ahora bien, no fue problema para que una y otro se lanzasen indirectas más o menos veladas en determinados momentos. El mal ambiente derivó en la insinuación, por parte de Matamoros, de su salida definitiva del formato de La Fábrica de la Tele.
Niegan “vetos”: “Aquí nadie echa a nadie de ningún sitio”
El comienzo de la emisión del jueves venía a zanjar el desencuentro entre las partes, con un apretón de manos simbólico y algunas bromas sobre su relación. “Nosotros no hemos coincidido no porque haya habido vetos ni nada”, afirmaba la presentadora, que quería así desmentir las habladurías sobre su situación en Sálvame y la responsabilidad del tertuliano en hipotéticas decisiones de la productora: “Aquí nadie echa a nadie de ningún sitio”. Matamoros, entre risas, apostillaba: “Estaría bueno”.
Para referirse a su relación, utilizaba la fórmula que en su día, allá por 2009, se empleó para abordar la separación de la infanta Elena y Jaime Marichalar: “Hemos tenido un periodo de reflexión, un cese temporal de la convivencia”, decía. “Estábamos los dos a ver quién llamaba al uno o al otro, hemos hablado y ponemos nuestro contador a cero. Y vamos a estar conviviendo sin ningún problema”.
Matamoros, ahora contra Patiño
El ambiente amistoso del reencuentro no ha durado demasiado, puesto que Matamoros ha acabado enfrentándose y dedicando aceradas palabras a otra compañera, María Patiño. En este caso, por haber desvelado esta información sobre la crisis en la relación sentimental del colaborador con su pareja, Marta López Alamo. La periodista aseguró que él le pidió a su novia que se marchara de la casa que comparten. Si bien Matamoros lo confirmaba, cuestionaba la forma en que Patiño la había conseguido.
“Te felicito, es cierto lo que cuentas, aunque has cometido un delito”, advertía, argumentando que la conversación con su partenaire se había producido a través de whatsapps. “Es un delito que tú cometes habitualmente porque te entrometes en la vida de los demás”, se defendió la aludida.