La isla de las tentaciones continúa calentando el estreno de su tercera edición en Telecinco y, tras mostrar los posados de las cinco parejas participantes antes de arrancar su experiencia en el concurso, ahora comienza a presentar a los solteros y solteras que tratarán de hacer caer en la tentación a unas y otros. Los primeros en dejarse ver son Isaac y Carla.
Isaac Torres
Isaac tiene 25 años y es un influencer de Barcelona. “Todo el mundo me conoce como el lobo y quiero encontrar, por fin, a mi Caperucita”, cuenta en declaraciones recogidas por la web del programa. Participó en la tercera edición del reality MTV Super Shore, donde coincidió con Ferre y Elettra Lamborghini.
Carla Divinity
De 28 años, Carla es también influencer radicada en Barcelona. “Me considero la mujer perfecta. Necesito a un hombre que se atreva a conocerme”, afirma. En 2019, su nombre sonó como posible concursante de GH VIP, pero finalmente se quedó en rumor.
Mari
Mari tiene 29 años, es de Murcia y es una modelo internacional. “Ha llegado el momento de sentar la cabeza y encontrar el amor de verdad”, nos dice.
Toni
Toni tiene 26 años, es de Barcelona y trabaja como dependiente. “Hago trajes a medida porque las mías son perfectas”, se presenta.
Ya conocemos a las cinco parejas
A quienes ya conocíamos en su integridad era a las cinco parejas de esta inminente nueva edición, cuya primera gala se verá en Mitele Plus antes que en Telecinco. Entre ellas encontramos a caras reconocibles del universo televisivo de Mediaset. Es el caso de Diego y Lola (Mujeres y hombres y viceversa) y Hugo (Gran Hermano 15), que concursa con su novia Lara. Jesús y Marina, Raúl y Claudia y Manu y Lucía completan el casting principal.
'La luz de la tentación', el giro de la tercera edición
La isla de las tentaciones 3 añadirá un giro en la mecánica con respecto a las anteriores ediciones. Se trata de “la luz de la tentación”, y, en palabras de Sandra Barneda, marca “el límite de vuestras parejas que acabáis de marcar ahora mismo”.
En su llegada a la isla, cada miembro deberá marcar el límite que no está dispuesto a permitir cruzar a su pareja en su paso por el programa, la línea roja que podría sentenciar el futuro de la relación. Cada vez que alguien ose rebasar el límite por primera vez, una luz se encenderá y una sirena sonará en la otra villa. De esta manera, los participantes tendrán un aviso de que algo grave ha pasado al otro lado, pero no sabrán quién ha sido el responsable ni qué es lo que ha hecho.