El cielo puede esperar cerró su segunda temporada con el funeral ficticio de Rozalén, tras haber sido “asesinada” por su compañera de piso al estar harta de escucharle con la guitarra. De esta forma, la artista llegaba al limbo donde pudo presenciar su propio sepelio.
Al evento acudieron músicos como el Kanka, Ismael Serrano, Victor Manuel y Ana Belén que conectaron por videollamada, también Bea (la intérprete de lengua de signos) que siempre le acompaña en los conciertos, y otros rostros conocidos como Carles Francino, Leticia Dolera, Ana Pastor y José Bono, que es padrino de la cantante.
“No se ha visto un funeral así desde Elvis” concluía el propio encargado del limbo, tras escuchar temas de Queen y acabar por todo lo alto con una versión de “Al amanecer” interpretado por Alex Cooper y Fresones rebeldes que emocionó a la protagonista.
“En el mundo de los cantautores hay más testosterona que en Forocoches”
Ismael Serrano fue el primero en subir al escenario: “Es una gran pérdida porque era una artista de una sensibilidad poética inigualable, y porque en el mundo de los cantautores hay más testosterona que en Forocoches”. Y acabó lamentando que “la gente cuando está triste se pone Ismael Serrano, la movida es qué me pongo yo ahora”.
Le siguió Carles Francino: “Se ha muerto en el momento más inoportuno, sería el Antonio de la Torre del cine, estaba en todos los fregaos. Siempre que le llamábamos venía”. Recordó que la conoció a través de José Bono: “Nos decía que cantaba muy bien, decíamos que era un plasta, hasta que la escuché. A partir de ese momento fui yo el que daba la turra para que escuchara todo el mundo a Rozalén”.
Leticia Dolera también dedicó unas palabras a la cantante: “La conocí hace un par de años. Teníamos mucho en común, a las dos nos ponían a parir en redes sociales y eso une mucho. Pero es verdad que le encantaba enviar audios, muy largos, y una tiene muchos libros de feminismo que leer”. Para acabar hablándole directamente a la fallecida: “Te admiraba mucho, me encantaba cómo cantabas canciones y cómo exponías tus ideas”.
No pudo faltar Bea: “La gente se piensa que soy muda y cuando hablo casi les da un infarto”, bromeó. “Ella era muy buena y cariñosa... cuando quería. Era como nuestra mamá pato. La he visto hacer magia en el escenario”, confesaba.
Y el último cantante en subir al estrado fue El Kanka: “Conocí a Rozalén en Macedonia, rodeados de artistas de Europa y nos explicamos cosas de la loca juventud para ver quién era más gamberro”.
Ana Pastor: “Rozalén me enviaba audios infernales”
Tras ellos, llegó el turno de los rostros fuera del mundo del arte, como Ana Pastor que bromeó con que no estaba acostumbrada a hacer discursos en funerales: “No es como unas elecciones que lo vamos a repetir cada 6 meses. Yo le pedía cosas para El Objetivo y me enviaba audios de whatsapp infernales. Me contaba cómo le iba el huerto y pensaba que me iba a mandar otras cosas”. Recordó que la cantante “recibía muchos mensajes de haters, pero esa naturalidad de ella es una de las cosas que le hizo llegar muy lejos, la sensibilidad, la valentía, siempre le ha caracterizado”. Y acabó con su mítica frase: “Estos son los datos de Rozalén y vuestras son las conclusiones”.
José Bono, su padrino, quiso dedicarle un discurso que acabó en aplausos: “No estoy acostumbrado a hablar en funerales. Imagino que no me esperaríais, supongo que pensabais que iba a ser el Bono malo”, dijo entre risas. “Le conocí por su padre, él me organizaba mis viajes. La conocí en un convento donde la bautizamos y la cogí en brazos. Tenía que hacer regalos, como los padrinos, y estuvo muy acertado porque fue una guitarra. Su padre quería que estudiara psicología pero ella era muy terca”. Para concluir con un guiño a la periodista presente: “Es la primera vez que estoy en un sitio al lado de Ana pastor y no me interrumpe”.
Tras ver todo el funeral, Rozalén se emocionó: “Me siento muy cuidada por mucha gente, es verdad que he tenido que demostrar mucho pero soy muy afortunada. Siempre tuve el sambenito de cómo no voy a triunfar si soy ahijada de Bono, por eso tuve que luchar más”.