En 'Sábado deluxe'

María Patiño se disculpó con Isabel Pantoja por llamarla “egoísta”: “Perdóname si he sido insolente”

Redacción

Isabel Pantoja llamó a Sábado deluxe este 17 de octubre para tratar de consolar a su hijo Kiko Rivera, que estaba sentado frente a las cámaras explicando que no es feliz y que tiene la autoestima por los suelos. “Estoy en un momento de mi vida muy jodido. Debería ir a un psicólogo (...) Estoy triste, decaído, no estoy feliz con mis metas”, explicó el Dj, que dijo no haber hablado sobre este tema con su familia. “Estoy en el subsuelo, en el puñetero subsuelo”, añadió después.

La Pantoja llamó al programa para transmitirle su apoyo y con el ánimo de que no siga torturándose con la idea de que no está bien. “Nunca vas a estar en el subsuelo. Eres una persona noble, eres una persona buena. Tienes una familia que nos morimos por ti (...) No quiero que sigas hablando de esos temas, Francisco, eso te hace mal. Me hace mal. Quiero a mi hijo, al de siempre, al contento, al alegre (...) Lo que tú estás pasando no es importante, y te voy a explicar por qué: han fallecido millones de personas, eso sí es importante. Lo tuyo se puede curar. Los que se han ido, ya no”.

Las palabras de la cantante no gustaron demasiado a Kiko, que pidió “abrazos y besos” en lugar de reproches por su estado de ánimo. Y tampoco sentaron bien a la presentadora del Deluxe, María Patiño, que ni pudo ni quiso contener su breve resumen sobre la intervención de la Pantoja cuando ella aún seguía en antena. “¡Qué egoísta!”, susurró Patiño, que después, consciente de que los espectadores y, posiblemente la tonadillera, habían escuchado su exclamación, ofreció sus disculpas a la protagonista del momento.

“Es verdad que ha salido de mi boca, en la intención de que veo a una madre destrozada pero, en un momento determinado, estoy viendo a un hijo destrozado. Y a veces las madres no queremos ver lo que tenemos al lado. Si te he ofendido, Isabel, no tengo ningún problema en pedirte disculpas. Entiendo perfectamente el sufrimiento que estás pasando, sé lo que se puede querer y adorar a un hijo, pero te puedo garantizar que yo hacía tiempo que no vivía una verdad y un testimonio tan sincero de un chaval que está pidiendo abrazos, besos y ayuda. Y aunque el mundo esté mal y gire a nuestro alrededor lo que está pasando, tu hijo en su casa, cuando cierra la puerta, está sufriendo. Perdóname si he sido insolente, pero era lo que quería decir. Nunca he visto a tu hijo llorando como lo he visto hoy. No lo puedo abrazar por el rollo este del covid, que si no, te juro que lo cogía y lo achuchaba”.

La cantante dijo no haberse dado por aludida porque no ha sido una madre egoísta y le ha dado lo que ha podido “y más”. “Jamás pensé que mi hijo se encontraba como se encuentra”, afirmó la Pantoja, que se quejó por no haber podido hablar de este tema con su hijo en la intimidad.