El Hormiguero recibió este jueves 31 de marzo a María Pedraza, que acudió al espacio de Antena 3 junto a Marta Hazas para promocionar su película Las niñas de cristal. Una cinta del cineasta Jota Linares que conecta a la joven actriz de Toy Boy con vivencias de su pasado, tal como ella misma reveló a Pablo Motos.
En el filme que estrena Netflix este 1 de abril Pedraza da vida a Irene, una bailarina que entra a formar parte del Ballet Clásico Nacional. Pero su pasión por la danza no es el único punto en común entre intérprete y personaje, pues también pasa por situaciones que la propia protagonista ha vivido en sus carnes.
“La protagonista de la película sufre anorexia, y tú también la tuviste”, le planteó sin rodeos el presentador de El Hormiguero. “Sí, a ver...”, comenzó respondiendo la actriz, que quiso poner en contexto la historia de su personaje: “Irene sufre también ese síndrome del impostor. Cuando entra a formar parte de la compañía como primera figura llega la responsabilidad, el miedo, la presión, las envidias, y el quedarse sola. Porque una bailarina al fin y al cabo camina sola”, apuntó.
Entrando en terreno personal, María Pedraza prosiguió: “No sé si me equivoco o no, pero la danza requiere ciertas aptitudes estéticas y físicas, y al final sí. Yo toqué este tema y salí sola de ello”, reveló. Fue entonces cuando Motos quiso entrar en detalles: “¿Pero te medías y te pesabas todos los días?”, preguntó. “No a ese nivel, porque el personaje está llevado al extremo, pero traté de dedicar esto con mucha distancia. Es un tema importante. La película no se centra en eso, pero es algo que le acompaña y va a más porque la exigencia es incluso mayor”, respondió la intérprete, que desvió el tema de lo personal a la ficción.
Pese a los intentos de Pedraza por centrarse en lo relatado en la película, el conductor de El Hormiguero insistió: “¿Tú contabas las calorías cuando veías un plato?”. “Sí, las contaba”, contestó escueta. “¿Y ahora las sigues contando?”, volvió a preguntar Motos. “No. Ahora de hecho me paso, postres y de todo. Ahora siento que vivo guay y que disfruto de la comida”, sentenció la actriz.