Martínez y Hermanos ha abierto nueva temporada en Movistar Plus+ con Mario Casas entre su primer trío de invitados. El actor acudió para hablar de su debut como director, Mi soledad tiene alas, pero aprovechó para hablar de sus inicios en televisión con SMS. Sin miedo a soñar, el serial juvenil de laSexta que supuso su primer protagonista y donde coincidió, por breve periodo, con el presentador, Dani Martínez.
Ambos hablaron de aquella experiencia seminal y de la frustración de Martínez por su despido. El leonés ya tuvo oportunidad de abundar sobre su paso por el serial en 2022. Entonces conjeturó que la altura había sido un inconveniente para hacer de pareja con Amaia Salamanca. Ahora, con Casas, el cómico retomaba el tema.
“Cuando Mario tenía 20 años coincidimos en un trabajo, pero es verdad que poco tiempo por una movida”, bromeaba Martínez, mostrando una foto del rodaje de SMS, antes de jugar con el título del filme de Casas. “Yo sí que sentí la soledad porque me echaron antes de empezar... Y no me dio muchas alas”.
“A ver, no te echaron”, apuntó Casas. “¡Pero hubo un día que no volví, Mario!”, replicó rápido el aludido.
“Se necesitaba un físico como más de macarra”
Casas expuso los motivos que, a su juicio, motivaron la decisión: “Era un tema de perfil, porque de verdad que lo hacías muy bien. Era una cosa de físico”, antes de que Martínez se echase las manos a la cara. Mientras el público reía, el invitado se explicaba. “Se necesitaba un físico como más de macarra. Y tú tenías cara de buen chaval”. Raúl Peña fue el encargado de sustituir a Martínez, que según el protagonista de Grupo 7 daba más con ese perfil rebelde.
Martínez aseguró, por su lado, “tener el motivo” de su despido, uno en el que estaba Casas implicado. Tirando de una vieja orden de rodaje: “A Mario le recogían a las 7:55, y a mí a las 8:30. ¿No me habrá echado este cabrón porque le recogían muy pronto?”.
“Ahí no tenía yo ni decisión [...] Si además estábamos todos cagados”, afirmó. “¡Claro, por lo que me pasó a mí!”.
Se durmió en una proyección en casa de Antonio Banderas
No fue la única anécdota que contó Casas sobre su pasado y sus pinitos como estrella juvenil. También habló de su debut en el largometraje, con un papel en El camino de los ingleses a las órdenes de Antonio Banderas, y del momento un tanto vergonzante que pasó ante este.
Durante el periodo de trabajo, el actor y director malagueño le invitó a su casa, junto a otros compañeros de reparto, para una proyección de Locos en Alabama, primera película que dirigió. “Eran las 11:30 de la noche... Y a los cinco minutos, me dormí”. “Estaban Raúl Arévalo, Fran Perea... Solo me dormí yo. Estaba nervioso...”, añadió, justificándose, recordando que, desde entonces, ha vuelto a colaborar con Banderas profesionalmente (y sin caer dormido).