Quién debe ganar 'MasterChef Celebrity 7', la edición de “mujeres muy fuertes”
Un despiste de Isabelle Junot en la prueba de expulsión de la semifinal hizo que Masterchef Celebrity 7 no hiciera historia con una final exclusivamente de mujeres. La marquesa fue eliminada contra todo pronóstico y eso permitió que Manu Baqueiro se convirtiera en finalista.
De este modo, aunque todo apuntaba a que el desenlace de esta edición -que se emitirá dividido en dos noches, la de este lunes y el martes- iba a ser únicamente femenino con Patricia Conde, Lorena Castell, María Escoté y la aspirante franco-danesa, finalmente se repetirá la fórmula de la tercera edición en la que Mario Vaquerizo tampoco dio opción a un desenlace solo de mujeres con Ona Carbonell, Paz Vega y Antonia Dell’Atte.
Pero más allá de marcar un hito o no, lo que sí ha logrado el talent culinario es un desafío aún más importante: el de superar el agrio recuerdo que dejó la muerte de Verónica Forqué tras participar en una sexta edición muy controvertida. Esta nueva entrega ha sido mucho menos polémica, con alguna discusión entre aspirantes que acababa en abrazo, y con más amor y cocina que la anterior.
Así, la séptima edición no tendrá una “final femenina” como nos pedía Lorena Castell en una entrevista antes de estrenarse la edición, pero sí será recordada por la participación de unas “mujeres muy fuertes que han hecho remar a los hombres”, como nos adelantaba María Escoté en la misma cita en el FesTVal de Vitoria.
Y ante tales finalistas, opinamos quién debería ganar Masterchef Celebrity 7, en una última gala que se verá entre este lunes 28 (la primera prueba y la de exteriores, que decidirá a los dos duelistas) y el martes 29 (para el duelo final definitivo), en La 1 de TVE.
Patricia Conde, una luchadora a fuego lento
Desde el arranque, Patricia Conde ha sido una de las favoritas para convertirse en la ganadora de esta edición. Porque, a pesar de haber tenido uno de los pasos más irregulares (fue la mejor durante las primeras semanas, expulsada la cuarta por un fallo, volvió en la repesca y se convirtió en finalista), la realidad es que lo ha dado todo.
La presentadora ha demostrado su profesionalidad en todo momento, concentrándose en todas las pruebas y presentando algunos de los mejores platos de la temporada. Sus ganas de aprender le arrancaron alguna lágrima en la semifinal, cuando confesó que su hijo le pedía que la expulsaran para volver a jugar con ella. Y aún así, no ha perdido nunca su sentido del humor.
Por todo esto, Conde sería una firme candidata a ganar una edición en la que ha enamorado a todos (compañeros, jueces y espectadores) sin ella desviarse de su objetivo final: convertirse en la nueva Masterchef Celebrity España.
Lorena Castell, la alegría picante de las cocinas
Aunque Lorena no llegaba con el nivel culinario más alto del casting, su actitud y talento para ello la han convertido en una de las aspirantes más estables de la edición. En cada gala había una o dos pruebas en las que su brillo era indudable, y si no lo lograba, su alegría le subía puntos.
Con la sonrisa por bandera, sus capitanías han sido de las mejores al ganarse la complicidad de los compañeros y generar buena sintonía en los momentos de mayor tensión. Algo que los jueces le han agradecido semana tras semana.
Castell es de esas mujeres fuertes capaces de arrasarlo todo cantando y bailando, mientras el resto está derrotado en el suelo. Así, sería otra gran apuesta para alzarse con el codiciado título, al ser buena cocinera de forma individual pero también en equipo.
María Escoté, la cocción más elegante
La otra gran luchadora de la edición es, sin duda, María Escoté. Acostumbrada a ser ella la que juzga, la que manda y la que valora en el desaparecido Maestros de la costura, la única baza que podía explotar en su nueva faceta como concursante era la de ser la que crea, y lo ha bordado.
Sin ser de las favoritas ha acabado ganándose un puesto en la final con uno de los postres más complejos del programa, que presentaba por todo lo alto y sobrada de tiempo. Esto demostraba la evolución de una mujer que logra todo lo que se propone.
Si existe un ejemplo perfecto de evolución, ese es el de Escoté. Porque se propuso hacer historia en la moda, pero cuidado con que se lo proponga en la cocina, porque si quiere, lo hará. Y podría ser la gran sorpresa de la final.
Manu Baqueiro, el perejil de todas las salsas
Manu Baqueiro es de los concursantes que van pasando desapercibidos y llegan a la final sin que nadie diera un euro por ellos. Solo que él no ha sido un mueble, él se ha hecho notar, ha sido uno de los protagonistas (medio) en la sombra.
Aparentemente más preocupado por ligar que por cocinar, las mujeres fuertes le han puesto las pilas y han logrado que se concentrara cuando debía y sacara lo mejor de sí mismo en cada prueba.
Quizá por eso sea el que menos merezca el ganar, porque ha demostrado menos talento culinario que el resto y ha necesitado del entorno para prosperar. Pero siempre es necesario este tipo de aspirante más relajado, para dejar que el resto despunte.
Las audiencias de 'Masterchef Celebrity 7' y los planes de futuro de TVE
La semifinal de MasterChef Celebrity 7 lideró la noche en La 1 de TVE con un 16% de cuota y 1.512.000 espectadores, su segundo mejor dato en la presente edición. El programa, que vive una de sus ediciones menos vistas, sigue con todo siendo lo más seguido en la cadena pública, e incluso amplía distancias con sus rivales.
Por ello, TVE continúa confiando en el formato y ha aprobado que la productora Shine Iberia grabe nuevas entregas del talent show culinario del que son jueces Jordi Cruz, Samantha Vallejo-Nágera y Pepe Rodríguez. Su último acuerdo garantiza que habrá MasterChef 11, MasterChef Celebrity 8 y MasterChef Navidad, como ya detallamos.
La primera de estas versiones –que avanza ya por su undécima edición– llegará con un cambio destacado. TVE desdoblará sus galas semanales para conseguir un efecto doble: se recortará la duración del programa (que en la actualidad genera muchas quejas entre los espectadores porque termina bien entrada la madrugada); y se duplicará la presencia de un formato que genera mucho público a TVE.
El hecho de que la final de esta séptima edición Celebrity se compartimente en dos mitades permitirá testar esta futura estrategia que se pondrá en marcha ya con la undécima edición de anónimos, que no solo duplicará el número de emisiones semanales sino también el número de aspirantes para afrontar su nueva realidad.