Tras más de dos meses de cocina, MasterChef Celebrity 9 ya tiene a sus primeros semifinalistas: Marina Rivers, Pitingo, Inés Hernand, Francis Lorenzo y Pocholo.
Los dos primeros se alzaron en la prueba de exteriores, siendo los únicos salvados. Mientras que los otros tres se ganaron el puesto en una prueba de eliminación en la que tuvieron que reproducir un postre de Jordi Roca. La peor parte de la noche se la llevó Cristina Cifuentes que salió expulsada por la textura de ese helado que no convenció a los jueces.
Eso sí, la expolítica se marchó lamentando la razón de su eliminación: “Me voy de rojo y por unos frutos rojos. Es que lo mío es el azul”, bromeó en una clara referencia a su Partido Popular.
Todo ello en una entrega en la que cocinaron para sus amigos, después se midieron con los chefs Begoña Rodrigo y Pepe Solla en una colaboración histórica y finalmente inventaron un nuevo sabor de helado.
Primera prueba con la cata a ciegas de los amigos de los aspirantes
Para la primera prueba de la noche contaron con la visita de Laura Londoño - ganadora de MasterChef Celebrity 8- que pidió a los aspirantes un plato que fuera el fiel reflejo de cada uno de ellos, capaces de cautivar los que mejor los conocen.
Las creaciones fueron catadas por sus amigos: las influencers Marta Díaz y Agostina Goñi; los cantantes David Bustamante y Concha Buika; los intérpretes Lydia Bosch, Miryam Gallego, David Castillo y Jedet; la política Susana Díaz; el diseñador de moda Alejandro G. Palomo; la abogada Bárbara Royo; la periodista Isabel Rábago; la exboxeadora Joana Pastrana; los empresarios Nicolás Vallejo-Nágera y José Luis López; el psiquiatra Josep Maria Fàbregas, y el productor Daniel Écija, entre otros.
La mayoría de los votos a ciegas de los comensales y amigos fueron para el plato de Inés, mientras que nadie votó ni a Cifuentes, ni a Pitingo. Por su lado, los jueces confesaron que coincidían “bastante con los comensales”, ensalzando los platos de Marina, con “la evolución flipante” de Francis y el “rico” cocinado de Inés. Fue esta última la que salió escogida como la mejor.
Prueba de exteriores con concursantes de 'OT 2023' y primeros semifinalistas
Aspirantes y equipo se trasladaron hasta el hotel Exe Moncloa, para enfrentarse a una prueba inédita en la que se midieron contra los dos chefs creadores de los platos a elaborar.
Los concursantes formaron un único equipo - Inés capitaneando junto a Pocholo, Francis, Cifuentes, Marina y Pitingo- que sería valorado de forma individual, y que compitió contra los cocineros Begoña Rodrigo y Pepe Solla.
Durante el cocinado, hubo momentos en los que los chefs hasta dudaron de si les iban a vencer los aspirantes. Pero “en ejecución y sabor”, siempre les iban a ganar, según apuntó Jordi Cruz.
A mitad de cocinado aparecieron Lucas y Juanjo -concursantes de OT 2023- para ayudar a ambos equipos. A la vez que Inés se derrumbó ante la tensión del cocinado: “Estoy atascada”, confesaba entre lágrimas a sus compañeros, que la abrazaban para animarle.
Finalmente, pudieron sacar las elaboraciones adelante, pero Inés asumió que “la capitanía había sido un desastre porque la gente pedía más de ella, pero no lo pudo dar”. Ella señaló a Pocholo como el menos colaborativo y él se mostró en desacuerdo, argumentando que no había recibido buenas indicaciones.
También estuvieron bien Francis y Cifuentes, pero no para recibir un delantal blanco. Por lo que los únicos aspirantes que se salvaron fueron Pitingo y Marina, los primeros que se convirtieron en semifinalistas.
La expulsión de Cristina Cifuentes y las emotivas palabras de Inés Hernand
Inés, Pocholo, Cifuentes y Francis llegaron con los delantales negros a la prueba de eliminación para encontrarse con el maestro repostero Jordi Roca (tres Soles Repsol). El chef les pidió que reprodujeran un postre suyo y le integraran un helado único de un sabor que no existe.
Lo que parecía sencillo se complicó por momentos. Sobre todo a Cifuentes a la que se le quemó el crumiel, también a Pocholo que se mostraba totalmente perdido porque la repostería era su punto flojo, a Francis se le cayeron todos los utensilios, pero sin perder los nervios y a Inés se le percibió mucho más serena y segura.
Llegado el momento de la cata, Inés fue la primera en entregar un postre que calificaron como “el mejor que había presentado”, le siguió Pocholo con un helado con un sabor “anárquico, pero tan bueno que compensaba”, la tercera fue Cifuentes que falló con una “textura desagradable”, y cerró Francis con un postre con crema de orujo que “funcionaba”.
Por lo tanto, Pepe sentenció lo más evidente: “El aspirante que debe abandonar las cocinas es Cristina Cifuentes”. Ella se despidió deseando que la final estuviera protagonizada por Marina e Inés, aunque de Inés resaltó su “genialidad”. Mientras que la influencer y presentadora le dedicó unas emotivas palabras tras su sorprendente amistad: “Has sido y eres una persona generosa, buena, conciliadora, cariñosa, cuidadora, trabajadora. Muchas gracias por quitar la venda a mucha gente y demostrar lo que eres y lo que vales”, zanjó.