Inicia su cuarto curso en Cuatro

'Todo es mentira' abrió temporada con un “in memoriam” a todos los colaboradores que han abandonado el programa

Redacción

6 de septiembre de 2021 20:12 h

Todo es mentira inició este lunes 6 de septiembre su cuarta temporada en antena, con Risto Mejide ya de vuelta a su puesto tras las vacaciones veraniegas y con dos de sus anunciadas incorporaciones a bordo: la actriz Anabel Alonso y el exministro y ahora eurodiputado José Manuel García-Margallo. “Soy una novedad aunque no sea nueva”, decía la primera, que decía estar “nerviosa” pero “ilusionada” en su debut como tertuliana. El político, que hizo gala de un llamativo sentido del humor durante su estreno, bromeó cuando el presentador le preguntó cómo estaba: “Te lo diré al final del programa”.

La llegada de los nuevos colaboradores, a los que habrán de sumarse también Esperanza Aguirre, que será fija, y José Luis Ábalos, que prometió participar al menos este jueves 9, era la excusa para que el programa producido por La Fábrica de la Tele bromeara con la larga nómina de expertos con la que han contado desde su estreno, algunos de los cuales se acabaron marchando tras desencuentros. “Uno es lo que es y llega adonde llega no solo por la gente con la que comparte la vida sino con la gente con la que ha estado. Y hay que ser agradecido”, apuntaba Mejide.

“A todos los colaboradores que nos han dejado”

A “todos los colaboradores que nos han dejado” quiso dedicarles este primer programa TEM, que incluso preparó un vídeo In Memoriam, para recordar todos los nombres. Así, se pudieron ver, en un irónico blanco y negro, con música de cámara, las caras de, por orden de salida, Beatriz Talegón, Malena Contestí, Cristina Cifuentes, el Doctor Alfonso Cabeza, Cristina Fallarás, Marta Nebot, Jaime González, Juan Carlos Girauta (“¿dónde estará ahora? No sé”, acotó Risto), Javier Negre, Elsa Ruiz, Itziar Castro (Risto y cía mandaron un beso a las dos), Princesa Inca, Díaz Villanueva (“este quién era”, se escuchaba decir a Miguel Lago), Cristina López SchlichtingAntón Losada, y por último a Marcos de Quinto. “Bueno, no todo son penas”, comentaba Lago de fondo.

Sin embargo, el programa jugaba a aventurar la identidad del siguiente en dejar el espacio, e incluían al propio Margallo en este “homenaje”. “Es como en la gala de los Goya, que enfocan al señor y de repente está ahí sentado”, decía Lago. El aludido se lo tomaba a risa y añadía sobre esta hipotética salida: “Bueno, espérate a la semana siguiente”.

“Este programa es un triturador de colaboradores”, decía cariacontecida Alonso, que poco antes no había tenido inconveniente en saltarse el turno de palabra por guion e improvisar para soltar un chiste: “Voy a entrar cuando considere, porque si se me ocurre algo...”.