Si la semana pasada Chenoa tuvo que abandonar una prueba de El Desafío al verse superada por su miedo a las alturas, este viernes le ocurrió algo parecido a Mónica Cruz.
La actriz tenía que cruzar una pasarela sostenida a gran altura, pisando sólo las baldosas que le impedirían caer al vacío. Aunque trató de memorizar los números correspondientes a esos peldaños, cuando se subió a al puente colgante se quedó en blanco.
Y allí arriba, a cinco metros de altura, la hermana de Penélope Cruz se sintió completamente angustiada. “¡Es que no puedo! Ayer lo hice, pero no sé qué me pasa hoy. No lo he memorizado... y eso es lo que me está frenando. Me da miedo”, lamentó mientras sus compañeros trataban de animarla.
El presentador del programa, Roberto Leal, le dio la oportunidad de abandonar cuando vio que la concursante se echaba a llorar: “Mónica, tú decides. No vamos a presionar a nadie”.
Ella asintió con la cabeza, quería bajarse de aquella plataforma que rozaba el techo del plató. “No sabéis el cabreo que tengo conmigo misma. Estoy muy nerviosa, llevo así toda la semana. Lo siento, de verdad. Lo he intentado pero no puedo”, confesó para dar por acabada su prueba.