Que Netflix ha encontrado en The Witcher su gran franquicia al estilo de Juego de tronos estaba ya claro, a cuenta del éxito obtenido por la primera temporada y de la puesta en marcha, meses atrás, de una película animada en torno al universo creado por Andrzej Sapkowski. Ahora, a ese segundo proyecto hay que añadir un tercero en torno a la saga literaria: la plataforma ha anunciado la puesta en marcha de Blood Origin, una miniserie de seis partes que servirá como precuela de la serie.
Ambientada en un mundo élfico 1.200 años antes del mundo de The Witcher, Blood Origin contará una historia perdida en el tiempo: el origen del primer brujo y los eventos que conducen a la crucial “conjunción de las esferas”, cuando los mundos de monstruos, hombres y elfos se fusionaron para convertirse en uno.
“Es un reto emocionante explorar y expandir el universo de The Witcher creado por Andrzej Sapkowski, y estamos deseando enseñarles a los fans los nuevos personajes y una historia original que enriquecerá aún más nuestro mundo mágico y mítico”, declara Lauren Schmidt Hissrich, showrunner de la ficción protagonizada por Henry Cavill, que ejercerá también de productora ejecutiva en esta.
Declan de Barra, guionista de Los originales y Iron Fist, será el showrunner de una producción que contará con la implicación de Sapkowski actuará como consultor creativo en la serie. “Es emocionante ver que el mundo de The Witcher, como fue planeado desde el principio, se está expandiendo. Espero que atraiga a más fans al mundo de mis libros”, dice el escritor polaco.
The Witcher: Blood Origin se filmará en el Reino Unido en fechas por concretarse. Jason Brown y Sean Daniel de Hivemind, y Tomek Baginski y Jarek Sawko de Platige Films, serán los productores ejecutivos.