Orestes Barbero se encuentra “muy desanimado” tras perder el bote de Pasapalabra. Según Luis de Lama, exconcursante del programa que presenta Roberto Leal, el burgalés no para de pensar en los errores y las jugadas que ejecutó o podría haber llevado a cabo en su duelo final con Rafa Castaño.
El último cara a cara tuvo lugar el pasado jueves, cuando Castaño completó El Rosco de una sola tirada. El sevillano consiguió así los 2.272.000 euros que había acumulados en el bote del programa.
Luis de Lama pudo hablar con Orestes tras la emisión del esperado desenlace. Según ha explicado en Espejo Público, lo encontró “muy desanimado”, empeñado en analizar todas sus jugadas para saber qué errores cometió.
“Está intentando encajar todas las piececitas para que su cerebro le diga: ''Venga a seguir para adelante, porque si no, nos vamos a volver locos'”, comenta el exconcursante, que trató de “darle ánimos”.
No obstante, reconoce que “es normal” que Orestes se sienta así, desanimado, porque llevaba mucho tiempo intentando conseguir el bote y, para más inri, lo había acariciado en varias ocasiones.
“Yo intenté darle ánimos, pero la verdad es que es normal que se sienta así, porque 7 años estudiando y teniéndolo ahí... porque lo ha tocado varias veces”, ha recordado.
Orestes llegó a Pasapalabra en 2016. Lo dejó en 2019 cuando el concurso se reformuló por su paso de Telecinco a Antena 3. En octubre de 2021 regresó al programa y permaneció en él durante 360 emisiones, convirtiéndose en el concursante más veterano.
En todo este tiempo ha estado muy cerca de ganar El Rosco no pocas veces.
El 16 de marzo vivió su último duelo con Rafa Castaño, al que se había enfrentado en 197 ocasiones. La suerte no se puso de su lado y fue desbancado por la apabullante jugada del sevillano, que acertó del tirón todas las palabras del Rosco.
Visiblemente afectado, aunque sin perder la sonrisa, Orestes pidió a la audiencia que no sintiera “pena” por él.