Así forja Chenoa su complicidad con los concursantes de 'OT 2023': lo que no se ve en las galas de Amazon

Laura Pérez

Terrasa —
13 de febrero de 2024 17:14 h

OT 2023 pondrá el broche el próximo lunes 19 de febrero con la celebración de su gran final, en la que se coronará a Naiara, Paul, Ruslana, Lucas, Martin o Juanjo como primer ganador o ganadora en Amazon Prime Video. Una edición que ha estado marcada por su integración en el mundo del streaming y también por la figura de una Chenoa que ha acabado convirtiéndose en todo lo que se esperaba de ella cuando se anunció su fichaje: la presentadora ideal del nuevo Operación Triunfo.

Pocas decisiones han generado más consenso en el universo OT que la elección de la cantante como conductora e imagen de la nueva era que el formato musical arrancaba en la televisión de pago. Salida de la exitosa primera generación de 'triunfitos', y con sobrada experiencia en la industria musical y televisiva, Chenoa se antojaba como la persona idónea no sólo para capitanear el 'barco', sino también para cerrar su propio círculo personal y profesional.

Llegados al final de la travesía, y tras once galas en directo en Prime Video, puede decirse que la presentadora ha cumplido el reto de comandar el transatlántico: ha impregnado el programa de su sello, ha podido controlar situaciones de tensión y ha construido una relación de confianza con los concursantes que quizás puede pasar algo más desapercibida para ese público 'galero' de Amazon, pero que este 12 de febrero quedó evidenciada cuando Ruslana, recién nombrada finalista, se abrazó a ella desahogando la tensión acumulada tras lanzar su comentado mensaje al público (y jurado/profesores).

Lo que no se ve de Chenoa en las galas de 'OT'

Chenoa se convirtió en protagonista involuntaria de la 'semi' por un comentario a Bea que muchos en redes sociales se tomaron como un dardo a su excompañera Rosa López, y que tuvo que aclarar y defender como un simple piropo y consuelo a la concursante que fue expulsada a las puertas de la final.

De ella se ha dicho también a lo largo de la edición que 'despachaba' a los participantes en las entrevistas y que no estrechaba lazos en unas galas marcadas por un ritmo en el que, sencillamente, no había tiempo para más. Y lo cierto es que tal como pudo comprobar verTele in situ este lunes, esa complicidad sí existe y se forja precisamente cuando las cámaras no miran y los concursantes más lo necesitan.

Es a las 22:00 horas cuando los espectadores se conectan a la plataforma para ver qué depara la noche de lunes a sus concursantes favoritos. Sin embargo, para Chenoa la gala comienza mucho antes, y alrededor de las 21:00 horas ya está en el plató de ese Parc Audiovisual de Terrasa para hacerse a un espacio y un público que tiene que dominar durante las siguientes tres horas. Micro en mano se dirige a los asistentes para contar anécdotas y ganarse su colaboración, empezando a construir una relación que resulta clave en un programa en directo.

Así las cosas, cuando se inicia la cuenta atrás y se enciende el piloto rojo de su cámara, la presentadora ya está en casa. Y si los nervios van por dentro, parecen disiparse cuando los concursantes entran en plató y arranca oficialmente la semifinal de OT 2023. A diferencia de las demás galas de la edición, la undécima no empezó con el sillón vacío, ya que los tres primeros finalistas no tuvieron que pasar por la 'Green Room' en la que los artistas se relajan antes de actuar. Algo que ayudó a mejorar las dinámicas de la gala y que les tuvo a todos más conectados con el show y con la propia Chenoa.

En ese sentido, y como pudimos ver en el mismo plató, la artista no se dejó ni una canción por bailar ni una actuación por ovacionar, siendo la primera fan de sus 'pupilos'. Siguió en directo los pasos de la coreografía de Martin, como demostró cuando el concursante cruzó la pasarela, y aplaudió como la que más números como el de Bea, como también evidenció ante las cámaras cuando le tocó despedir a la participante eliminada.

Chenoa no se privó tampoco de reaccionar a las actuaciones con los propios compañeros, buscando miradas cómplices en Martin mientras Juanjo cantaba El Patio, o disfrutando como nadie de la que bautizó después como la “Super Bowl” de Naiara a ritmo de Jennifer López.

El momento más complicado de la noche para todos fue el de la elección del grupo final de seis finalistas: lloró Noemí Galera cuando fue portavoz de la Academia y dio su pase a Lucas, y lloraron Bea y Ruslana cuando sintieron que la aventura estaba a punto de terminar para una de ellas. Las dos nominadas 'exprés' de la semifinal se pasaron todo el tiempo de votación pañuelo en mano, y fue durante la actuación del invitado Pablo López cuando Chenoa quiso acercarse a ellas para darles consuelo y transmitirles un largo mensaje de tranquilidad y confianza antes de cruzar las tres la pasarela para conocer el veredicto de los espectadores.

El clímax de esta unión intergeneracional de 'triunfitos' llegará el próximo lunes en la gran final, cuando la presentadora acompañará a los seis finalistas sobre el escenario para interpretar juntos el Last Dance de Donna Summer que Chenoa ya hizo suyo en OT 1. Será entonces cuando pondrá fin a una primera aventura como conductora de 'su' Operación Triunfo y, a la espera de luz verde para la segunda, podrá continuar con una complicidad artística ya de igual a igual, forjada fuera del foco.