Pese a que “What comes after” ha sido el último episodio de Rick Grimes en The Walking Dead, no ha atraído a una audiencia mayor. El quinto capítulo de la novena temporada atrajo a 5.4 millones de espectadores y un rating de 2.1 entre adultos de 18-49 años, recoge Deadline.
Este dato supone solo un pequeño incremento del 6% sobre el total de espectadores. Además, la franja demográfica es más baja que la del episodio lanzado el pasado 28 de octubre, “The Obliged”, donde se mostró la primera parte de la salida del actor Andrew Lincoln. Sin embargo, el capítulo de la madrugada del domingo al lunes sí se ha convertido en lo más visto de esta temporada desde su estreno el 7 de octubre, donde obtuvo 6.1 millones de espectadores y un 2.5 de rating.
Teniendo en cuenta que la serie ha alcanzado nuevos mínimos de audiencia este año, es evidente que toda mejora es positiva aunque sea pequeña. No obstante, corrobora el desgaste que está sufriendo la serie, donde ni la marcha de su personaje principal ha generado mayor interés.
Caso contrario sucedió en Talking Dead, donde el radio de rating tras el episodio fue bastante más amplioTalking Dead, al menos, si lo comparamos con el dato que obtuvo la semana anterior. La entrevista posterior a Lincoln sobre sus planes con el universo zombie al margen de la serie, le valió un público compuesto por 2.7 millones de espectadores y un rating de 1.0.