Después de que Rocío Flores reapareciera el jueves 10 de febrero en El programa de Ana Rosa, esa misma tarde comentaron su situación en Telecinco en Ya son las ocho, algo que a la hija de Rocío Carrasco no pareció gustarle.
Al parecer, a Rocío Flores no le gustó un comentario que Alexia Rivas hizo en el espacio de Sonsoles Ónega. La tertuliana opinó sobre la intervención de la hija de Antonio David en su vuelta a El programa de Ana Rosa, llena de reproches a Rocío Carrasco y a su marido, Fidel Albiac.
“Rocío Flores se habrá arreglado el pecho pero tiene una soberbia encima… Ella no quiere contestar a nada pero está sentada para hablar de su familia y pertenece a uno de los clanes más importantes”, comentó Rivas.
Por estas palabras, Rocío Flores decidía llamar en directo a su tía, Rosa Benito. Los espectadores pudieron ver una conversación telefónica con la colaboradora tratando cariñosamente a su sobrina. Tras la llamada, le transmitió el mensaje a Alexia Rivas.
“Me dice, y a demás está en su derecho, que ella el contrato que tiene es para hablar del reality, que es una colaboradora y que si habla de lo que ella está viviendo tampoco es para que la critiquemos”, le relató. A esto, Alexa Rivas solo se reafirmó, provocando una discusión con Rosa Benito.
Conversación a gritos
“Tampoco vamos a ser hipócritas: Rocío Flores está sentada para comentar de realities y será válida para hablar en televisión pero está ahí sentada por ser hija de Rocío Carrasco y nieta de la Jurado”, dijo contundente.
¡Que todos estamos aquí por algo, no te lo voy a permitir!“, comenzó a reprocharle Rosa Benito a Alexia Rivas, realmente alterada. ”Todos estamos aquí por algo. ¡Yo llevo aquí 16 años! Tú también estás aquí por otra cosa“, continuó.
“Yo estoy aquí por lo que pasó con Merlos, pero sé dónde estoy”, señaló Rivas ante los comentarios de su compañera. “Podéis pintarlo o maquillarlo, pero la actitud de Rocío Flores es otra”, defendió la periodista, comparando su actitud con la de Isa Pantoja. “Cada uno llama para matizar lo que quiere”, intentó poner paz Sonsoles Ónega a una discusión que se difundía por toda la mesa.