La administradora única provisional de RTVE, Rosa María Mateo, ha explicado en una respuesta parlamentaria al partido liderado por Abascal por qué ya no cree que sea necesario que la corporación pública identifique a Vox como un “partido de extrema derecha”.
El escrito contestaba a tres cuestiones formuladas en el Congreso por el diputado de ese mismo partido Manuel Mariscal, que preguntaba a la responsable de la Corporación por los criterios para etiquetar a los partidos políticos en la televisión pública y recordaba lo establecido en el libro de estilo de RTVE: “Los profesionales de RTVE tienen el deber de ofrecer a los ciudadanos una información rigurosa, neutral, imparcial, plural e independiente”.
Rosa María Mateo explica primero los motivos por los que la cadena pública etiqueta a los partidos políticos, razonando que “el criterio de los informativos de RTVE es evitar calificaciones sobre los partidos políticos, salvo que el contexto obligue a situarlos en una corriente determinada”.
En el caso de Vox, la administradora única provisional de la corporación razona que “solo cuando un partido político es una formación desconocida para la audiencia en general, hay que situarla en un espacio determinado del espectro político”, y reconoce que “una vez que ese partido político es sobradamente conocido por la audiencia, sobran las etiquetas”. Una condición que ya cumple el partido.
“A día de hoy, Vox es suficientemente conocido”
Rosa María Mateo también responde a la pregunta de por qué RTVE ha calificado a Vox como un partido de “extrema derecha”. La periodista explica que cuando el grupo político nació la corporación pública consultó a académicos y politólogos, y que éstos determinaron que el partido “cumple al menos cuatro características fundamentales para situarlo en la extrema derecha: un nacionalismo de carácter primordialista (su concepción de España como nación), su discurso anti-inmigración, sus propuestas contra los movimientos feministas y la apelación al pueblo en línea con los movimientos populistas europeos”.
Pese a ello, la administradora única provisional de RTVE insiste en que “a día de hoy, Vox es un partido político suficientemente conocido como para no tener que ser etiquetado siempre”, y por ello explica y demuestra con ejemplos del Telediario que ya se usan fórmulas como “el partido de Santiago Abascal”, al igual que con Ciudadanos, PP, PSOE o Unidas Podemos.
En su tercera y última respuesta, Rosa María Mateo niega rotundamente que la razón para calificar a Vox como un partido de “extrema derecha” hayan sido presiones del Gobierno o de algún otro partido: “No, en absoluto. Los informativos de RTVE los hacen profesionales de la información con criterios periodísticos. Ni reciben instrucciones, ni las aceptarán”.