La metamorfosis de 'Sola/Solo': la evolución del reality de Mitele hasta el giro que lo cambia todo
El pasado mes de marzo saltaban las alarmas en Mediaset. La crisis sanitaria del coronavirus obligó a la UEFA a aplazar un año la Eurocopa, la gran apuesta del grupo para el verano, y con ello se hizo necesario encontrar nuevos formatos y estrategias para paliar el vacío que dejaba el deporte rey. La cancelación de tan importante competición deportiva se sintió como un terremoto en Mitele Plus. Puesto que la plataforma de pago de Mediaset iba a ofrecer los partidos, se vio entonces en la obligación de buscar contenidos alternativos con los que retener a su público y evitar cualquier traspié frente a su inmediato competidor: Atresplayer Premium.
Mediaset anunció rápidamente que Mitele Plus tendría su propio reality show. Los realities son el gran filón del grupo, una mina de oro que parece infinita y que sobrevive sin Gran Hermano pero con éxitos tan incontestables como los de Supervivientes y La isla de las tentaciones, que acaba de iniciar su tercera temporada con récord de audiencia. Aprovechando que el público –su público– parece encantado con este tipo de formatos, Mitele lanzó en septiembre Solo/Sola, un modesto reality en el que, siguiendo la exitosa fórmula de la 'videovigilancia', varias celebridades permanecen encerradas en una pequeña casa que se convierte en su hogar durante una temporada.
Los concursantes, que están solos pero pueden comunicarse con el exterior, llegan a este humilde 'pisito' con algún propósito, algún desafío personal que deberán ejecutar. Y además, tanto los abonados de Mitele como los programas de Telecinco pueden plantearles otras pruebas adicionales para dar más emoción a sus anodinas vidas en este cubículo de 45 metros cuadrados en el que disponen de salón, cocina en office, baño con ducha y terraza. De este modo se pretendía recrear una situación similar –al menos en apariencia– a la que estaban viviendo millones de españoles encerrados en sus viviendas en plena pandemia, según explicó Jaime Guerra, director de Producción de Contenidos de Mediaset España.
Cinco meses después de su estreno, Solo/Sola afronta un cambio de mecánica que pretende aportar emoción al reality: desde este lunes 25 de enero el programa se llamará Solos y el 'pisito' será ocupado por varios concursantes, siendo Rafa Mora y Macarena Millán quienes inauguren esta nueva etapa.
Seis inquilinos VIP
Anabel Pantoja fue la primera concursante de Solo/Sola. “La hemos elegido por el positivismo mostrado por ella misma en sus redes sociales durante el confinamiento, su capacidad de generar contenido original y divertido y su alto engagement tanto con los espectadores de televisión como con los usuarios de redes sociales”, indicó el directivo. La sobrina de la Pantoja se sometió al experimento con el propósito de prepararse física y mentalmente para su boda.
El inicio de las emisiones fue turbulento para Mediaset, que tuvo que aplacar los intentos por piratear la señal de Mitele desde Twitch. Pasados ocho días, Anabel hizo las maletas y cerró la puerta para concluir un capítulo de su vida bajo los focos que no pareció agradarle demasiado: “Igual estando más tiempo habría vivido cosas o sorpresas más bonitas, pero con las que he tenido me basta y me sobra para saber de lo que soy capaz y no soy capaz”. La colaboradora de Sálvame fue criticada por casi todos sus compañeros del programa, que la llamaron “fracasada” por interrumpir su estancia y por haberse comportado como un “mueble” que apenas dio contenidos jugosos con los que alimentar a la siempre hambrienta programación de Telecinco.
La siguiente en ocupar este mini apartamento creado en la sede central de Mediaset España fue Sofía Suescun, hábil concursante de realities que atesora dos importantes victorias en Gran Hermano 16 y Supervivientes 2018, aunque fue expulsada de Gran Hermano Dúo al echarse en su contra a buena parte de los espectadores, soberanos a la hora de decidir quién se queda y quién se va. La celebrity, colaboradora del programa Ya es mediodía, llegó a Sola con el reto de aprender a bailar, prueba que superó en 15 días.
Recogió el testigo el Maestro Joao para someterse a su particular examen: conocer y recorrer mundo, un auténtico desafío teniendo en cuenta que no se contempla la posibilidad de que los concursantes abandonen el 'redil'. Tras 14 días recibiendo visitas, entre ellas las de Jorge Javier Vázquez y Chiqui, Maestro Joao saludó al nuevo inquilino de Solo/Sola: Gianmarco Onestini. El que fuera concursante de Gran Hermano VIP 7 –donde coincidió con el vidente– se propuso recuperar el amor, algo que decía haber perdido tras su ruptura con Adara.
Gianmarco pasó más de un mes conociendo mujeres pero, finalmente, se fue a su casa como había llegado: solo. Ninguna de las tres finalistas (Jenny, Sasha y Kathy) le hicieron sentir inexplicables cosquilleos en el estómago: “El proceso no ha sido nada fácil. Creo que no ha sido sencillo para vosotras pero tampoco para mí… tanto vídeo y tantas cosas, tienes un maracaná en la cabeza que no sabes qué pensar bien y tal vez cometes errores”, se disculpó con ellas por videoconferencia.
Después llegó Miriam Saavedra. La peruana, ganadora de GH VIP 6 y exnovia de Carlos Lozano, se instaló en el 'pisito' de Mediaset para ampliar sus conocimientos sobre España, país en el que se ha hecho muy conocida en apenas poco tiempo, pero del que aún desconoce muchas cosas. Tras su estancia, en la que protagonizó una sonada discusión con Rafa Mora, al que acabó pidiendo que se marchara, Saavedra traspasó las llaves del apartamento a Maite Galdeano, madre de Sofía Suescun y concursante de Gran Hermano 16. Su objetivo en la casa, a la que llegó en diciembre, no pudo ser más oportuno: “recuperar el espíritu navideño y haceros compañía en estas fechas”.
El esperado giro de guion
Más de un mes después, Maite, que recientemente participó también en La casa fuerte, sigue siendo la inquilina de Solo/Sola. Pero no por mucho tiempo más. Próximamente dejará paso a Rafa Mora y su novia Macarena Millán, que serán los primeros en inaugurar esta nueva etapa del reality con un cambio de funcionamiento que básicamente consiste en que dos o más personas podrán convivir en este humilde hogar.
La originalidad del programa llamó la atención a nivel internacional y tendría la fortuna de ser seleccionado como uno de los formatos televisivos más frescos, reconocimiento que le llegó en el MIPCOM, evento anual con los principales creadores de contenido de entretenimiento a nivel global. Sin embargo, no parece que Solo/Sola haya conseguido ser la fuente de suscriptores en que ansiaba convertirse. Con datos del pasado mes de octubre, Mitele acusaba una importante fuga de abonados que le situaba por debajo de su inmediato competidor.
Ante este panorama nada halagüeño, la plataforma de pago de Mediaset ha puesto en marcha varias iniciativas, además de una subida de precios cuyo impacto está aún por llegar. Entre otras novedades, Mitele Plus está apostando por reforzar la oferta exclusiva que disfrutan sus socios, a los que se ofreció el prestreno de Got Talent y La isla de las tentaciones, y a los que se dará la posibilidad de conectar con Mujeres y Hombres: una hora con cámaras.
Es en esta estrategia de relanzamiento en la que encaja el cambio de mecánica que llega a Solo/Sola, que desde este lunes 25 de enero, con la llegada de Rafa y Macarena, apostará por juntar a varios concursantes bajo el mismo techo y ante las mismas cámaras. “Tendremos concursantes desconocidos entre sí, exparejas con cuentas que saldar, personas que mantienen o han mantenido una amistad pero que dejaron pendientes temas por resolver, en fin, tantas ecuaciones posibles como las que vemos cualquiera de nosotros en nuestras propias vidas”, avanzan desde la empresa.
El objetivo de esta vuelta de tuerca es evidente: aderezar la convivencia con cierta dosis de drama para llamar la atención de la audiencia con polémicas y tramas interesantes que sirvan de alimento a la programación de Mediaset.