Viajeros Cuatro se desplazó este lunes hacia la ciudad estadounidense de Los Ángeles, sinónimo de glamour y cine, mucho cine. Al fin y al cabo, allí se encuentra el barrio de Hollywood, meca del séptimo arte y, en el caso que nos ocupa, también zona de residencia de Sonia Monroy, que ejerció de anfitriona para el programa de Cuatro en su recorrido por el Paseo de la Fama, el Dolby Theatre, el Teatro Chino y otras paradas obligatorias para todo buen cinéfilo. Un minitour en clave cinematográfica que sirvió para conocer la actual vida de la televisiva, pero que también dejó alguna que otra anécdota a destacar.
Con respecto a lo primero, Sonia Monroy contó que lleva más de doce años viviendo en Hollywood, y que si se instaló allí fue con el objetivo de convertirse en una gran estrella de cine. Por ahora no lo ha conseguido, aunque no dudó en presentarse, entre risas, con las siguientes palabras: “Soy actriz y filmmaker [cineasta], y os voy a enseñar mi barrio: Hollywood. ”Ay, qué cutre“, añadió a continuación, y entre risas, antes de contar que estaba en plena promoción de su propia webserie. ”Me la grabé aquí, en Hollywood. Trata de mi vida“.
Tanto le gusta Hollywood a Sonia Monroy que incluso lleva tatuado el nombre del barrio en su espalda. No es para menos, pues en estos años allí ha tenido la oportunidad de coincidir con estrellas del calibre de Tom Cruise, al que consiguió grabar un saludo. “I love you. Ay, huele tan bien... Es que Tom llevaba un perfume... Por favor, followers míos, descubrid qué perfume llevaba Tom, que se lo quiero comprar a mi marido”, dijo junto a la estrella del actor de Misión Imposible en el mítico Paseo de la Fama. “Walk to the Fame, en inglés”, se preocupó en traducir la que fuera integrante de las Sex Bomb. Eso sí, erróneamente, pues la traducción correcta es Walk of Fame, tal y como consta en la propia web del Paseo de la Fama.
Entre otras anécdotas, la concursante de Supervivientes 2011 también recordó el día que se encontró a Antonio Banderas y su entonces esposa, Melanie Griffith, a la que tachó de ser muy “celosa”. “Me hice una foto con él y ¡ra!, [Melanie] me metió un codazo. Todavía me duele”, contó, también entre risas, la actriz. Más risas, desde luego, que cuando fue con el equipo de Viajeros Cuatro al Teatro Chino y besó una foto en grande de su admirada Marilyn Monroe, pero con tan mala suerte que dejó la marca de su pintalabios sobre la fotografía de la actriz.
“Ya la he liado. No me acordaba que no llevaba el permanente. Madre mía, por esto me pueden multar, ¿eh? Me quitan la nacionalidad”, lamentó Monroy, que sacó un pañuelo del bolso y lo frotó sobre la foto de la icónica actriz. “Venga, antes de que llegue la policía. Ya está, ya está”, dijo la televisiva, que aparentemente arregló su desaguisado. El segundo relacionado con Hollywood, pues aún se recuerda la farsa que montó en los Oscar de 2015 vestida con la bandera española.