Los concursantes de Supervivientes 2020 tuvieron la oportunidad de recibir noticias de sus familiares este martes, aunque no todos la aprovecharon como a Carlos Sobera le hubiera gustado. Las conexiones fueron a través de otros compañeros, de tal modo que el programa impuso la mecánica de 'teléfono escacharrado'. Así, Adara pudo darle un mensaje a su madre Elena Rodríguez a través de José Antonio Avilés.
“Estoy súper nerviosa”, reconoció su hija nada más empezar la llamada, “dile a mi madre que estamos todos muy bien, que la quiero muchísimo, que estoy súper orgullosa de ella, que no se deje pisar por nadie”. Por último, pidió que le transmitiera que “no entre en guerras con Hugo y que piense en lo que tienen en común”. “Te lo prometo”, respondió ella.
Sin embargo, antes de despedirse, Adara se dirigió directamente a José Antonio para hacerle también una petición: “Que te portes un poquito mejor con mi madre, te lo pido por favor”. Él le dijo que “vale”. “Eso no estaba previsto Adara”, le recriminó en seguida Sobera, “era una conversación con tu madre a través de Avilés, pero gracias a los dos”.
Instantes antes, Elena había sido quien había hablado con la madre de Avilés, Carmen, que le reconoció que era “una gran concursante y espero que alguna vez consigas entender a José Antonio y podáis ser unos buenos concursantes”. Para su hijo, le transmitió que “todos estamos muy bien, a tope con él, que se está quedando con un figurín y que saque fuerza”.