“En términos de audiencia, son los primeros informativos de la televisión”. Eso le espetaba el ministro de Hacienda y Función Pública, Cristobal Montoro, ante las críticas que el senador socialista Óscar López realizaba sobre la situación en TVE. Sumida en el bloqueo administrativo que impide la renovación del Consejo de Administración y, con ello, el cambio, los periodistas de la cadena pública han empezado a protestar de forma evidente delante de las cámaras contra la manipulación en sus servicios informativos.
Y en tan tensa tesitura, las audiencias de los Telediarios acostumbran a ser el caballo de batalla tanto de los miembros del gobierno de Mariano Rajoy como del propio presidente José Antonio Sánchez, para negar la mayor. “La solidez del liderazgo de audiencias que ostenta TVE en 2017 y en lo que llevamos de año es resultado de la aceptación e incremento de consumo de los espectadores en todas y cada una de las ediciones”, decía el directivo a mitad de marzo.
El argumento es cristalino: si los informativos de La 1 lideran pese a las críticas que llegan tanto desde dentro como desde fuera tal vez se deba a que no existe la parcialidad que se denuncia casi a diario. Los datos que difunden desde TVE hablarían por si solos. “Los Telediarios de TVE líderes en abril y durante 18 meses de forma ininterrumpida”, manifestaban desde el ente el primero de mayo. Ahora bien, ¿no son los datos también interpretables? ¿Es la situación tan halagüeña para la corporación como se dice?
La ración extra del simulcast para engordar los datos
Los datos aportados por Barlovento Comunicación en su análisis mensual dibujan un panorama sensiblemente distinto. Mientras desde RTVE se hablaba de una media de 2.109.000 espectadores y 14.6% de cuota durante el pasado mes, la consultora habla de “empate técnico” con Informativos Telecinco en la ponderación de las ediciones de sobremesa y noche: el registro medio de La 1 está en 1.983.000 televidentes, frente a los 1.976.000 del primer canal de Mediaset.
Pero vayamos más allá: si nos fijamos en el análisis mensual, comprobamos que es Antena 3 quien lidera en la edición de sobremesa de lunes a viernes, y Telecinco la que se corona en el prime time de días laborables. La 1 solo consigue liderar en las mediodías de fin de semana, repartiéndose el primer puesto con Mediaset.
Solo hay que mirar la letra pequeña en las notas que Televisión Española aporta. Volviendo a la nota anteriormente mencionada de TVE, se especifica que sus informativos “vuelven a cerrar el mes siendo los líderes de la oferta informativa”: “Son los más vistos desde hace 18 meses (noviembre de 2016) y los primeros en cuota por undécimo mes (desde junio de 2017), con una media de 2.109.000 espectadores y 14,6% de cuota de pantalla en La 1 y Canal 24 Horas”.
En este final de oración está la trampa: La 1 aprovecha la emisión en simulcast (esto es, a la vez) de los noticiarios tanto en su primer canal como en su marca Todo Noticias para “engordar” sus números. Es decir, la cadena pública solo manda en lo que a información se refiere cuando junta sus dos canales.
Un ejemplo de esta práctica lo encontramos esta misma semana, apenas horas antes de que Montoro profiriese la afirmación sobre el liderazgo de La 1. Según los datos de esta, el Telediario 1 presentado por Pilar García Muñiz se imponía este lunes 7 de mayo a la edición de mediodía de Antena 3 Noticias en número de espectadores: el espacio de noticias superaba los 2 millones en su emisión paralela con Canal 24 Horas (2.054.000 televidentes y 16.4% de share, siendo exactos). No obstante, los datos de Kantar Media, que disgrega los canales de la radiotelevisión estatal, muestran una realidad diferente: el espacio de Atresmedia obtenía 2 millones de espectadores y una cuota media del 15.9%, mientras que el de La 1 quedaba por debajo, con 1.949.000 espectadores y un 15.5%.
Este ejemplo permite entender estos mecanismos de autoprotección de la corporación para mantener su primacía continua sobre los programas de las televisiones privadas. Pero no es el único.
TVE divide el sumario del resto de la emisión
Como se puede comprobar en los análisis diarios que publica VERTELE servirá para certificar que TVE parte la emisión de sus Telediarios en dos partes: por un lado, el sumario de apertura de 4 minutos, y por otro, el resto de la emisión.
Así, la duración del programa se acorta y se ajusta a la de los de Telecinco y Antena 3, que son más cortos y consideran la sección de deportes como microespacio propio en audiencia. Con ello se aseguran un número de espectadores más equiparable a las de estas cadenas.
La división de franjas y programas a base de copys, cabe decir, no es única de TVE. Prueba de ello son los bloques deportivos escindidos en las meidiciones del resto de los informativos en las generalistas. Se beneficia de la ausencia de un criterio coercitivo por parte de Kantar Media para medir resultados. La empresa de audimetría no impide que una operadora televisiva pueda decidir cuándo termina un programa y empieza otra aunque se mantengan presentadores, plató y contenidos, como es el caso.
Ya se proclamó “líder de información”, sin serlo, en 2013
En cualquier caso, que TVE trate de maquillar, o directamente de falsear, sus resultados de audiencia autoproclamándose líderes no es algo nuevo. No hay más que revisar la hemeroteca y volver a mediados de 2013, un año después de que Fran Llorente fuera cesado como director de informativos de TVE tras la toma de control del PP del ente con el decreto que puso fin a la etapa de una presidencia de consenso.
La corporación se siguió promocionando como “líder en información” en junio de 2013, pese a haber perdido la batalla en materia informativa tras una progresiva caída desde la salida del periodista y el relevo del área en manos de Julio Somoano. La 1 (12.2%) se vio entonces superada por Telecinco (13.7%), por delante en todas las franjas tanto en share como en espectadores.
La 1, entonces, tenía también su particular excusa para realizar esa afirmación: pese a su caída a segunda posición en la clasificación mensual, sus informativos seguían siendo los más seguidos atendiendo al cómputo global de la temporada 2012/2013.
El lejano liderazgo real de los tiempos de Fran Llorente
La situación, allá entonces como ahora, no tiene que ver con la que dejó Fran Llorente en junio de 2012. Tras ocho años en el cargo, al que llegó como sustituto de Alfredo Urdaci, legó una inmejorable herencia a los informativos. No solo en términos cuantitativos -fueron líderes de forma ininterrumpida durante cinco años durante su mandato-, sino también desde el punto de vista cualitativa.
Más de 200 premios fueron entregados durante esa etapa tanto a la redacción en bloque como a sus profesionales a título individual y a sus principales formatos. No solo a nivel nacional, con el Premio Ondas y con el Premio Nacional de Televisión en 2011 como reconocimientos más destacados, sino también a escala internacional, como el Global Peace Award de 2010 por su cobertura de conflictos internacionales.
“Gobierne quien gobierne, los españoles ya no tolerarán una TVE manipuladora y despilfarradora”, afirmaba Llorente a VERTELE en abril de 2011. Justo siete años antes de que el ejecutivo vigente del Partido Popular juegue con las matemáticas y la semántica para vender una imagen que no se ajusta a la realidad. Una realidad que, además, sus propios profesionales se esfuerzan por contar y por combatir.