La entrevista que Jimmy Fallon realizó en 2016 a Donald Trump cuando este aún estaba en la carrera electoral rumbo a la Casa Blanca fue un punto álgido para el auge en popularidad del ahora presidente y para el declive en la imagen del presentador de The Tonight Show. En su momento, se criticó que el showman “humanizara” al mandatario, permitiéndole dar una imagen más chistosa y menos beligerante y problemática. Todo ello se cristalizó en una imagen: la del televisivo alborotando el pelo del magnate.
Dos años después, el conductor del late night de NBC ha expresado su arrepentimiento por haber acogido en su show a Trump. “Fue un momento muy bajo para mí”, recuerda el cómico a The Hollywood Reporter, donde también explica cómo incluso perdió amistades entre sus colegas de profesión, que lo acusaron de “haber perdido toda credibilidad”. “Lo siento mucho. Nunca quise enfadar a nadie, ni jamás lo querré. Solo intento hacer un programa que sea divertido, pero cometí un error”, expresa. “Viéndolo en perspectiva, hubiera hecho las cosas de otra manera”.
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“¡Sé un hombre, Jimmy!”
Ni que decir tiene que estas palabras no han quedado sin respuesta. El presidente de los Estados Unidos no ha perdido la oportunidad para atacar a Fallon por “lloriquear”. “Dice que ahora lo haría diferente porque por ”humanizarme“ echaron fuego contra él. Entonces me llamó por teléfono y me dijo que hice ”audiencias monstruosas“. ¡Sé un hombre, Jimmy!”, exclama en su cuenta de Twitter.
Fallon dona a una ONG de ayuda a inmigrantes como respuesta
Tras este mensaje, Fallon ha decidido contraatacar y, también a través de Twitter, responder al ocupante de la Casa Blanca. El presentador anunció que en nombre de Trump realizaría una donación a RAICES, una organización no gubernamental fundada en Texas que se dedica a educar y dar servicios legales a familias inmigrantes y refugiados.
Cabe decir que desde entonces, Fallon parece haber aprendido la lección y haber combinado el humor habitual de su espacio con una mayor implicación en temas sociales. Así lo ha demostrado después del atropello contra una multitud en Charlottesville, Virginia, en agosto de 2017, por ejemplo. También al contribuir a la Marcha por Nuestras Vidas del pasado marzo en Washington, fletando varios autobuses para quienes quisieran acudir a la manifestación.