Polònia ha vuelto a expresar, mediante el humor y la ironía, su visión sobre el mediático juicio por el procès catalán que se celebra en la actualidad.
En su entrega de este jueves 14 de marzo, el programa de TV3 ha dedicado un sketch a mostrar cómo el juez Marchena acaba desesperado en una situación tan corriente como pedir un croissant de chocolate en un bar.
Pese a que la petición es clara, el camarero le ofrece “un croissant de chocolate un poco imaginativo”. Pero el juez no está de acuerdo, y se lo empieza pidiendo con respeto.
Sin embargo, el camarero actúa de forma similar al juicio del procés, intentando invalidar sus argumentaciones, rechazando las preguntas a los “testigos” (otro cliente del bar) y usando vocabulario judicial.
Marchena acaba saliéndose de sus casillas y, ya a gritos, le dice al camarero: “¡Hostias! ¡¿Cómo va a ser esta mierda un croissant de chocolate?! Basta de esta farsa. Esto es una magdalena con cuernos. Y usted no puede decir que es un croissant de chocolate, por mucho que lo adorne”.
En ese momento, el sketch gira para ofrecer la moraleja buscada, cuando el camarero le responde: “Ya... Y si no hay violencia, usted no puede decir que hubo rebelión, por mucho que lo adorne. ¿A que jode, eh?”.
Tras un breve momento de “cara a cara” entre el camarero y el juez, Marchena opta por irse y el camarero pide que pase el “siguiente”.