Con vistas a su inminente final, que tendrá lugar el próximo 6 de marzo, Amar es para siempre ha ido recuperando a los personajes que en esta última temporada han tenido menos protagonismo. A punto de acabar, la histórica telenovela de Antena 3 ha propiciado algunos reencuentros que, en cierto modo, servirán de homenaje a quienes pasaron por la Plaza de los Frutos.
[Cuidado, esta noticia contiene spoilers del capítulo 2823 de 'Amar es para siempre', emitido el 28 de febrero]
La familia Gómez se juntó de nuevo en el capítulo de este miércoles. Ocurrió de la manera más tonta, por una confusión que provocó algunas lágrimas y un disgusto completamente innecesario.
Ciriaco llegó a casa de sus padres totalmente descompuesto. Llorando a mares y confuso: Si Pelayo había muerto, ¿por qué Manolita y Marcelino no estaban destrozados? Por una razón sencillísima: porque el abuelo estaba perfectamente.
En el origen de la confusión estaba su hermana Luisita, que escuchó de malas maneras una conversación y sacó algunas conclusiones precipitadas. Luisita alertó a Ciriaco... y la noticia llegó rápidamente a todos los nietos del señor.
Ciriaco no es el único que volvió a la Plaza de los Frutos lamentando la trágica noticia. Catalina, Leonor y María también se iban a reencontrar con su familia. El único que decidió no aparecer por allí fue Manolín, que se llevó una buena bronca de Ciriaco por la frialdad con la que había reaccionado ante la noticia del fallecimiento del abuelo. El joven no se creyó a Luisita desde un primer momento.
Hay heridas que no terminan de cicatrizar, pero la familia Gómez, casi al completo, pudo celebrar junta este reencuentro inesperado.