¿Qué puede contarnos de su personaje?
Fernando del Caz es un banquero que va a Arazana a inaugurar una nueva sucursal de Banca Velasco. Aunque solo viaja con ese objetivo, al final decide quedarse a vivir y participar en la vida de este pueblo. Conocerá a todos sus habitantes, aunque le prestará especial atención a Sara Reeves –risas-. Además, tiene un secreto que se irá descubriendo según avance la trama.
¿Qué le gusta de Arazana para quedarse?
Solamente decide quedarse, no por nada en concreto, ve que le gusta el sitio. Aunque realmente abre la sucursal en este pueblo porque es pequeño, medio desconocido y él y su madre, que es la directora de la banca, están perpetrando un golpe de estado. Por eso deciden quedarse en Arazana, porque allí pueden planear el golpe tranquilamente al no ser una gran ciudad. Allí contactan con el general Baudilio para organizar el golpe. Digamos que Fernando tiene una doble vida.
¿Qué le pasará con el teniente Romero?
Lo que le pasa con el teniente Romero es un accidente. Hay una pelea entre el general Baudilio y el teniente. Fernando intenta separarlos y le quita un cuchillo al general, pero en la trifulca empujan a Miguel contra mí y se clava el arma sin querer. Ese suceso es que lo que va a hacer evolucionar al personaje, de golpe va a tener que vivir con un drama importante.
El era un hombre satisfecho con su vida, un banquero de éxito, está preparando un golpe de Estado por el bien de España, es un humanista, pero ha matado a una persona... Además, no va a poder confesarlo nunca porque está enamorado de Sara Reeves. Como ella se iba a casar con el teniente va a tener que vivir con ese conflicto toda la vida.
¿Qué trama va a tener con el personaje de Marta Hazas, Sara Reeves?
Sara no va a querer tener ninguna relación con nadie porque acaba de perder a su prometido. Él, aunque va a querer tenerla, se siente culpable porque sabe que el dolor que lleva Sara se lo ha provocado él asesinando al teniente y nunca se atreverá a confesarlo.
Sé que la madre de Fernando está totalmente en contra de su relación con el personaje de Marta porque no va bien a sus intereses militares.
¿Con qué personajes va a tener más relación?
Aparte de Sara Reeves, con Roberto, el cajero del banco y con el general Baudilio. Él está muy encima de Fernando porque le necesita para conseguir su sueño de juventud. Mi personaje intenta deshacerse de esa presión acercándose al personaje de Marta Hazas, pero hay algo que se lo impide...
¿Qué es lo que más le gusta de 'Bandolera' como serie? ¿y de la época en la que se ambienta?
De la serie me gusta la intriga y la acción con los bandoleros, lo que va a pasar con nuestra llegada... las tramas son ambiciosas y nada casuales.
De la época, me encanta el mundo de los vestuarios y en la serie se lo han currado mucho.
¿Cómo se ve vestido de banquero de final de siglo?
La primera vez que me puse esta ropa aluciné, es impecable. Me veo ahora y lo comparo con otros trabajos que he hecho y no tienen nada que ver, eso es muy interesante. Cualquiera que vea la serie va a pensar “este tío ha cambiado un montón” y eso esta muy bien.
¿Es cómoda esa ropa?
Sí, toda nuestra ropa está hecha a medida y estamos muy cómodos, aunque un poco calurosas para el tiempo en el que estamos –risas-. Es que los banqueros de esa época llevaban mucha ropa, eran hombres ricos y mostraban su poderío económico de esa manera ¡llevo más ropa que nadie! Lo bueno es que, en cuanto te vistes, te metes en el personaje enseguida.
¿Veía ‘Bandolera’ antes de trabajar en ella? ¿Qué personaje te había llamado más la atención?
Sí, he vistos varios capítulos y conocía las tramas. Creo que todos los personajes tienen un lado oscuro y eso gusta; por ejemplo, el capitán Olmedo (Eugenio Barona) tiene fuerza, pero también es un personaje despreciable, como le está pasando ahora al capitán Roncero (Mariano Llorente), que es una persona con dos caras... También me gusta mucho el mundo de los bandoleros.
¿Le vamos a ver montando a caballo o disparando un arma?
He dado clases de montar a caballo –risas-, pero no sé si me va a tocar o no, sé que me voy a pasar mucho tiempo metido en el banco. Igual algún día Fernando se va a dar una vuelta por ahí, pero seguro que le atracan –risas-.
¿Qué fue lo primero que pensó cuando entró en el plató de la serie?
Es como meterte en otro mundo. Hay otras series que con una estética más contemporánea y el salto que haces es menor porque te vistes de una manera más parecida a la tuya, los objetos que usas en el rodaje son los mismos que utilizamos normalmente... pero aquí estamos en otro mundo.
El atrezzo es genial, hasta cuando te dan un telegrama está escrito, el texto que tiene es el de la trama. Todos los detalles están muy cuidados y es muy agradable para el actor. El equipo técnico hace un esfuerzo muy grande para hacer más creíble nuestro trabajo.
¿Qué tiene la serie que hace que el público se enganche a ella?
Bandolera es fiel a lo que prometió desde el principio, por eso la gente se enganchó y sigue viéndola.