El 'making of' de Justin Bieber: Así levitó y 'acosó' a sus fans en su vuelta al 'Hormiguero'
Justin Bieber volvió a visitar ayer a Pablo Motos en El Hormiguero. El cantante, ídolo juvenil que ostenta el récord de peticiones del programa para asistir al plató con 36.000 solicitudes, estuvo por tercera vez junto a Trancas y Barrancas, generando aglomeraciones a las puertas del plató.
El Hormiguero reunió a 2.048.000 espectadores con un 11.6% de share (mejor resultado del programa desde la entrevista a Will Smith), un dato inferior a la última visita de Bieber en Antena 3, pero muy superior a la primera en Cuatro. El cantante causó la locura en el centro de Madrid, como podemos ver en el making of del programa contado por Marron, Jandro, Juan y Damián.
Bieber acudió así por tercera vez al show de Pablo Motos, después de sus visitas del 29 de noviembre de 2010 (en Cuatro, con 7.7% y 1.453.000 espectadores) y del 16 de noviembre de 2011 (ya en Antena 3, cuando marcó 16.3% y 3.308.000 seguidores).
La aglomeración en las puertas del estudio hizo que saliera a saludar por una ventana
Como en sus anteriores visitas, el cantante volvió a desatar la locura en Madrid, con aglomeraciones durante todo el día a las puertas del hotel en el que se hospedó, y aún mayores a las puertas del estudio de El Hormiguero.
Tal era la cantidad de fans que se habían agolpado que el propio Pablo Motos le pidió que se asomara a una de las ventanas para saludar a sus seguidoras, que colapsaban la madrileña Calle Alcalá.
Tres fans del público, puestas a prueba: recibir un beso de Bieber sin inmutarse
Una vez más, Bieber se mostró colaborativo de principio a fin. El cantante accedió a poner a prueba a tres de sus fans que se encontrabán en el plató del programa para conocer a su ídolo, y que se llevaron el “premio gordo” de la noche.
Las tres chicas tenían que aguantar sin inmutarse la cercanía del cantante, incluso sus besos en la mejilla. La campeona obtuvo su premio: un pack de objetos de Justin Bieber.
El cantante también premió la fidelidad de una de sus fans desde casa con una llamada en directo y un mensaje muy especial: “Carolina, te quiero”.
El cantante también se divirtió jugando al fútbol y “volando” a manos de un aerodeslizador junto a Pablo Motos, además de interpretar en directo una de sus canciones.
Se desmayó tras golpearse en la cabeza con una pared de vidrio en su concierto en París
La visita de Bieber a El Hormiguero sirvió, ya de paso, para tranquilizar a sus enfervorecidas fans, ya que el cantante sufrió en su último concierto en París un pequeño accidente por el que necesitó atención médica.
Durante unos de los cambios en su show, Bieber se golpeó la cabeza con una pared de vidrio, lo que le produjo una cierta desorientación, aunque siguió con el concierto. Poco después, cuando se dirigía a su camerino, al parecer perdió el conocimiento durante unos pocos segundos, por lo que tuvo que ser examinado por los médicos, que informaron que había sufrido una pequeña conmoción cerebral sin mayores consecuencias.
En Noruega, las autoridades casi decretan el estado de emergencia por su presencia
La última vez que visitó este país sus fans revolucionaron el ambiente y en esta ocasión no iba a ser menos. Justin Bieber volvió a Noruega y su estancia hizo que las autoridades se planteasen declarar el Estado de emergencia para controlar a sus miles de fans, como informa OTR/Press.
La fiebre de los Biebers logró revolucionar la ciudad de Oslo. Miles y miles de fans consiguieron abrumar a la policía, hasta tal punto que anunciaron que podría declararse el estado de emergencia y cancelar el concierto de Justin Bieber debido al comportamiento de los fans.
Biebers de toda Europa viajaron hasta el aeropuerto de Oslo el pasado martes para recibir a este ídolo adolescente. Se supone que esta actuación debía mantenerse en secreto, puesto que no era un concierto oficial, sino que se trataba de una intervención en la televisión.
Justin Bieber iba a cantar cuatro nuevas canciones que formarán parte del programa especial «Justin Bieber Believe: All Around The World» de la NBC, pero sus fans querían verle en persona y se las ingeriaron para perseguirle donde fuera provocando grandes estampidas.
La locura de los Biebers causó la preocupación tanto de las autoridades como del propio cantante, que no dudó en colaborar para controlar a sus enloquecidos fans.
El propio cantante tuvo que pedir calma a sus seguidoras vía Twitter
Justin Bieber publicó mensajes a sus seguidores por Twitter para que escucharan a las autoridades. «Por favor, escuchad a la policía. No quiero que nadie salga herido. Quiero que todo salga bien, pero vuestra seguridad es lo primero...» escribía a sus Biebers. «... para que el show se haga debéis escuchar a la policía. Estamos preocupados por vuestra seguridad y queremos lo mejor para vosotros. Por favor, escuchad», dijo Justin Bieber a través de Twitter.
Y eso que la visita de Justin Bieber a Oslo duró tan solo dos días, pero seguramente la próxima vez que el cantante visite este país, las autoridades no se lo piensen dos veces y envíen a sus disturbios para controlar a los enloquecidos Biebers noruegos.
Podría enfrentarse a seis meses de prisión por agredir a un paparazzi
Bieber, convertido en un fenómeno social que crece al mismo ritmo que el cantante, no siempre ha podido soportar la presión de ver cómo su vida privada es seguida por miles de fans y por cientos de paparazzis.
Hace pocas semanas, Bieber protagonizó una pelea con un fotógrafo que le seguía mientras daba un paseo con su novia, Selena Gómez, por Los Ángeles. El paparazzi denunció la agresión y la fiscalía pide ahora seis meses de prisión para Bieber.