Los accionistas de la plataforma de televisión digital terrestre Quiero TV rechazaron ayer, en una reunión del consejo de administración, la propuesta ampliación de capital de 17.800 millones de pesetas, necesaria para la supervivencia del proyecto, que será sustituida por un crédito por igual cantidad. La plataforma explicó en un comunicado que la fórmula adoptada permite a los accionistas adaptarse de forma más “flexible” a las “distintas alternativas estratégicas” que se están negociando. La compañía señaló que tomó esta decisión ante “el avanzado estado de las conversaciones que Quiero mantiene con diferentes empresas para asegurar el futuro del proyecto”. El holding Auna, principal accionista de la plataforma con una participación en torno al 49 por ciento, negocia desde hace algún tiempo con distintos grupos la venta de su participación. Ad“mira” para otro lado
Ayer se celebró consejo de administración de Admira (antes Telefónica Media), la filial de medios de Telefónica que parecía condenada a quedarse con Quiero TV. Pero en esta segunda reunión celebrada por el nuevo consejo quedaron claras las escasas ganas de Telefónica por comprar Quiero TV, “a no ser que instancias superiores lo impongan”, según fuentes de la compañía, presidida por César Alierta. Alierta y el presidente de Auna, Alberto Salazar Simpson, han mantenido diferentes conversaciones sobre el asunto, según las mismas fuentes. Telefónica no está dispuesta a desembolsar ni una peseta por la que ha sido y aún es la primera televisión digital terrestre de España, que tiene un agujero reconocido de 22.500 millones.