Una ex atracadora, una joven arruinada, una mujer estafada, una ex soldado, una seductora emigrante colombiana, un comercial argentino, un escolta de la policía vasca, un acompañante de mujeres y un jugador profesional de póquer que “buscan dar un giro radical a sus vidas” haciéndose con el premio del millón de euros.
Estos son los concursantes de “Anon1mous”, el nuevo e intrigante reality show de Antena 3, presentado por Ximo Rovira y producido por Globomedia, que se estrena este domingo a las 22:00 horas.
“La versión italiana duró sólo tres emisiones”
En la presentación celebrada hoy, Ana Rivas, directora de programas de la cadena, ha asegurado que “Unan1mous no es un reality show de convivencia sino un concurso. No se trata de discutir sino de ponerse de acuerdo de a quién le dan el millón de euros. Se trata de un reality bastante diferente a lo que estamos acostumbrados a ver”.
Según Rivas, “los concursantes están encerrados en un búnker espectacular y no saben nada de lo que ocurre en el exterior. Si hace frío, calor o qué hora es. Lo único que hacemos nosotros es darles de comer cuando creemos que tienen hambre”.
La unanimidad es la clave de “Unan1mous”, un juego en el que la estrategia e inteligencia emocional serán las armas que cada concursante utilice para convencer a todos los demás de que él y sólo él merece ganar el millonario premio. Es un reality totalmente abierto, de duración y final incierto, en el que lo único que se sabe con certeza es cuándo comienza el juego, en el momento en el que los nueve concursantes, que no se conocen entre ellos, entran en el búnker.
“Tienen perfiles muy particulares, no se conocen de nada y tampoco saben a qué vienen. Sólo les dijimos que era un reality en el que podían ganar mucho dinero”, asegura Ana Rivas, quien añade que “la versión italiana duró sólo tres emisiones porque en seguida alcanzaron la unanimidad”.
El programa no finalizará hasta que uno de los concursantes alcance, en votación secreta, el favor de sus compañeros de manera unánime. Los pactos para repartirse el premio estarán expresamente prohibidos y serán motivo de expulsión inmediata.
“Pueden inventarse su historia personal para convencer a los demás”
Joaquín Zamora, director de “Unan1mous”, aclara que “les damos mano ancha para que, si quieren, se inventen sus historias personales, para intentar convencer a los demás de que son ellos quien realmente necesitan ese dinero, y conseguir así los ocho votos. Después, ellos tienen que averiguar si las historias que se cuentan son o no verdad”. Según Zamora, el programa muestra “conflictos reales, muy serios, de adultos que se miran a la cara y que tienen que tomar rápidas decisiones”.
Por su parte, Ximo Rovira declara que se trata de “un formato muy sorprendente y novedoso al que no me ha costado adaptarme”. Según el presentador, “vais a ver a un Ximo muy distante con los concursantes ya que sólo apareceré en una pantalla, desde donde les iré contando las normas del concurso y las pruebas que tienen que hacer”.
El ganador puede llevarse un millón de euros, el mayor premio concedido por un reality
El premio, un millón de euros, es el mayor de cuantos ha ofrecido un reality en este país hasta el momento. Esta será la cantidad económica que obtendrán quien consiga convencer a sus compañeros, en la primera votación, de que él debe ganar el premio.
En sucesivas votaciones, si se produjeran, la cantidad puede variar al ponerse en marcha un dispositivo descendente. De no existir la unanimidad, los concursantes verán en una pantalla cómo descenderá el premio a partir de la primera votación, lo que les llevará a una lucha contra el tiempo, que en este programa se convierte en un enemigo implacable.
“Cuando el dinero empieza a bajar, ellos se ponen muy nerviosos”, asegura Ana Rivas, directora de programas de Antena 3.
Nueve participantes muy diferentes en busca de una segunda oportunidad
Cinco mujeres y cuatro hombres procedentes de ámbitos muy diferentes y con caracteres contrapuestos permanecerán juntos y aislados del mundo exterior, encerrados en un búnker, hasta que alcancen la unanimidad.
Sin un conocimiento previo entre ellos, los nueve participantes tienen algo en común: desean el premio de manera intensa, la misma intensidad con la que han vivido hasta su entrada en el búnker. Todos intentan dar un giro radical a su existencia y, para algunos de ellos, esta experiencia es una segunda oportunidad tras una vida muy dura.
CARMEN ESCRIBANO. 46 AÑOS EX ATRACADORA CON OCHO AÑOS DE CÁRCEL
Madre soltera con dos hijos (26 y 11 años de edad) de relaciones diferentes, conduce un camión del Servicio Público de limpieza en Barcelona. Con más de 35 atracos a sus espaldas y ocho años de cárcel, es una firme defensora de la reinserción social. Optimista, jovial y alegre a pesar de haber tenido una vida muy dura, le gusta la poesía, la música, el arte y la soledad. Tras la muerte de su madre cuando ella tenía seis años y la nueva boda de su padre, fue criada por su abuela. Se escapó de casa con 14 años y a los 16 comenzó a delinquir. Comparte casa con sus padres, sus dos hijos, sus tres hermanos y un sobrino.
¿Para qué quiere el premio?: “Para comprarme una vivienda, porque vivo con mis hijos en casa de mis padres y quiero darles una vida mejor, que se lo merecen. Además, me preocupa mucho la situación de mi hermano porque es minusválido y no sé quién cuidará de él cuando mis padres no estén. ”
YOLANDA LUENGO. 28 AÑOS ARRUINADA POR SUS NEGOCIOS
Experta en vino, Yolanda es una joven soltera aficionada a los juegos de rol. Fue estafada por un hombre, y luego montó un negocio que la arruinó. Debe una gran cantidad de dinero al Estado, a los bancos, a sus amigos y su familia. Extrovertida y, como consecuencia de los palos que ha recibido, desconfiada.
¿Para qué quiere el premio?: “Para pagar mis deudas y resolver mi situación económica, debo casi 200 millones de pesetas”.
VICTORIA CABRERIZO. 35 AÑOS ESTAFADA POR UN HOMBRE, QUIERE COMPRAR UNA CASA
Higienista dental que trabaja actualmente como teleoperadora. Comparte su vida con un “compañero sentimental” desde hace siete años, aunque ella tiene alquilado un estudio aparte. Ingenua, afable y simpática, su inocencia es un arma para sobrevivir en un mundo de depredadores. Tuvo una relación con un hombre que la estafó, y ahora su posesión más valiosa se reduce a varios trasteros.
¿Para qué quiere el premio?:“Para comprarme una casa. Si fuera mucho dinero, compraría un castillo abandonado para reformarlo. Me gustaría ayudar a mi familia y montar una empresa”.
NASSERA BEN MOHAMED MOHAMEDI. 29 AÑOS EX SOLDADO DE DIFÍCIL CARÁCTER
Nassera es de nacionalidad belga y origen marroquí. Mantiene una relación difícil con su familia. Formó parte del ejército hasta que la expulsaron y, desde entonces, ha deambulado por diferentes trabajos. Su fuerte carácter ha dificultado su relación con los hombres.
¿Para qué quiere el premio?: “Para gastarlo a manos abiertas: para viajar, para un cochazo, para un avión privado, un yate… y para ir a un castillo”.
SONIA LÓPEZ. 31 AÑOS UNA EMIGRANTE COLOMBIANA MUY SEDUCTORA
Colombiana reside en España desde hace siete años, Sonia se presenta como competitiva, valiente, responsable y lista. Asegura que la seducción es su principal arma para conseguir de los hombres todo lo que se propone. En su afán por ganarse la vida, ha posado para revistas masculinas y ha participado en algún programa de televisión e incluso en una telenovela. Está dispuesta a cualquier cosa para traer a España a su hija de 12 años, que vive en Colombia.
¿Para qué quiere el premio?: “Si gano me traeré a un hija de Colombia, me compraré un apartamento en la costa, un descapotable y montaré una productora de cine. Y si todavía me sobra dinero, me compraré una isla para hacer fiestas”.
GUSTAVO RODRÍGUEZ. 31 AÑOS. UN COMERCIAL ARGENTINO
Argentino, soltero y sin hijos, está muy seguro de sí mismo, hasta el punto de que dice que su religión es “la gustaviana”. Estratega, calculador, competitivo, con una alta autoestima y muy hablador, este empresario con vocación comercial reside en España desde hace seis años. Es un machista capaz de pelearse con cualquiera que mire a su acompañante.
¿Para qué quiere el premio?: “Quiero el premio para tener una calidad de vida mejor: viajar, ayudar a mi familia, comprarme un chalet en lugar de un piso y tener un Ferrari en lugar de un BMW”.
JAVIER ETXENIKE. 43 AÑOS. ESCOLTA EN LA POLICÍA MUNICIAL DEL PAÍS VASCO
Casado y con dos hijos, este donostiarra trabaja como policía municipal en el País Vasco, asignado al servicio de escoltas. Ama a sus hijos y su mujer por encima de todo. Ganar el concurso es para él una cuestión de orgullo. Es autodisciplinado, dominante, seguro de sí mismo, con madera de líder, ambicioso y competitivo.
¿Para qué quiere el premio?: “Con el dinero cumpliría mi gran sueño de comprar un caserío con 5 ó 6 caballos para mi mujer y mis hijos. También haría un viaje por Estados Unidos y si es mucha pasta, por supuesto dejaría de trabajar”.
MIGUEL MOLINA MARTIN. 27 AÑOS UN ACOMPAÑANTE AMBICIOSO Y DESCONFIADO
Malagueño, soltero, sin pareja y sin hijos, se gana la vida como acompañante de mujeres, utilizando su cuerpo como herramienta de trabajo y viviendo de noche. Se define como seductor, amable, listo, ambicioso y un gran actor que se reinventa dependiendo de la mujer que le necesite. Desconfía de todos, incluso de sus amigos. Hijo único y huérfano de padre de origen humilde, le gusta vivir bien, vestir con elegancia y conducir buenos coches.
¿Para qué quiere el premio?: “Quiero el dinero para montar un negocio potente: una empresa de espectáculos o un gran gimnasio. Con lo que me sobre, compraría una casa con piscina, una Harley, un barco y tendría una mujer despampanante acorde con todo esto”.
DAVID CÁMARA. 28 AÑOS JUGADOR PROFESIONAL DE PÓQUER
Madrileño, soltero y educado en un colegio privado en Estados Unidos. A pesar de haber estudiado Ciencias Políticas, se gana la vida como jugador de póquer profesional. Por su trabajo sabe lo que es ganar y perder mucho dinero. Frío, calculador, inteligente y carismático, aprendió desde niño a jugar a las cartas gracias a su abuelo. Los que le conocen resaltan que no soporta perder y alaban su juego.
¿Para qué quiere el dinero?: “Me gustaría profesionalizar el póquer y jugar en niveles más fuertes. Quiero el dinero para asegurarme la vida y fabricar más dinero, pero sin perder la cabeza”.
En un búnker, aislados, sin luz natural ni referencias temporales
Los concursantes desarrollarán su actividad dentro de un “búnker”. Aislados, sin teléfonos, sin luz natural y sin noción del tiempo, sus necesidades básicas estarán cubiertas por la organización del programa. Sólo tendrán una función durante su encierro: convencer a ocho compañeros/rivales de que uno mismo es el que merece o más necesita el dinero del premio.
El “búnker”, que mide un total de 550 metros, consta de un gran salón-comedor, aseos con duchas y dormitorios con literas. Además, hay varias salas insonorizadas y acondicionadas para las pruebas, las conversaciones con la dirección del programa y con el presentador, y las reuniones entre los propios concursantes.
La sala de verdad: Habitáculo donde se interroga a los participantes de forma individual para que cuenten sus impresiones sobre la convivencia y la marcha del concurso. Se hace uso de ella por decisión de cada participante o cuando lo indique la dirección del programa. Nada de lo que se diga en esta sala será utilizado en contra de nadie.
Sala de cristal: Habitación acristalada, aislada e insonorizada, en ella los concursantes entran en contacto a través de una pantalla con Ximo Rovira y se les somete a diferentes pruebas.
Sala de fumadores: Se trata de una zona de descanso con un pequeño catering donde se permite que los concursantes se reúnan para fumar, charlar y relajarse cuando lo deseen.
Mesa de votaciones: Es el centro neurálgico del “búnker”. Allí se reúnen todos para votar. Esta sala está rodeada de un estanque que sirve de elemento relajante para los participantes. Una voz en off indica a los participantes cuándo se sirve el desayuno, la comida y la cena, que entran por una compuerta, y cuándo es el momento de descansar y despertarse.
Reality con debate en directo presentado por Ximo Rovira
Cada domingo y en directo, Ximo Rovira conducirá un programa en el que se mostrará la marcha del encierro, resumiendo a la audiencia, con imágenes de lo sucedido en el búnker, qué ha sido lo más destacado de la convivencia. El presentador entrará en contacto con los participantes para recabar sus impresiones y organizará las votaciones.
En cada programa se celebrará una votación para elegir un ganador que, en caso de no ser unánime, irá seguida de la eliminación de un concursante que en la siguiente ronda de votaciones, podrá votar pero no ser votado. El concursante eliminado no abandonará el programa y podrá ser repescado.
Estas emisiones semanales, que cuentan con la presencia de público en directo, tienen un apartado fundamental: un debate moderado por Ximo Rovira en el que se contará con la presencia de familiares, amigos y conocidos de los participantes, así como con periodistas de la crónica social.
También participarán personas que buscan y han buscado una segunda oportunidad, buscavidas o aquellos que tengan trayectorias vitales semejantes a las de los concursantes y que puedan ponerse en su lugar y opinar.