Igual que puedes viajar por el mundo visitando catedrales, museos, monumentos, parques y espacios naturales, también lo puedes hacer visitando cementerios. Otra cosa es que te guste o no, pero si las necrópolis te llaman la atención hay muchos destinos donde los cementerios son los protagonistas de las principales rutas turísticas.
De hecho, algunos cementerios pueden llegar a tener tal atractivo que se convierten en verdaderas referencias turísticas, por lo que podemos hablar de un auténtico fenómeno de “necroturismo”. Y no por ser lugares tétricos y morbosos precisamente, sino por su belleza, su originalidad o por la relevancia histórica de los dueños de sus tumbas. Los hay tan populares que incluso algunos ofrecen visitas organizadas y guiadas para que no pierdas detalle entre lápidas y mausoleos.
Así, más grandes o más pequeños, más verdes o más urbanos o de una religión u otra, encontrarás un buen número de cementerios repartidos por el mundo que bien merecen una visita. Estos once cementerios que aquí te proponemos son solo un ejemplo de los camposantos más famosos y visitados del mundo, pero hay muchos otros que a bien seguro pueden aportar una nota diferente en tu próximo viaje.
Cementerio de La Recoleta en Buenos Aires, Argentina
El cementerio de La Recoleta, ubicado en el barrio del mismo nombre, es uno de los principales puntos de interés de Buenos Aires, tanto que muchas rutas turísticas que recorren la ciudad pasan por él. Aquí, entre espectaculares y lujosos mausoleos donde descansan líderes políticos y familias de renombre, hay uno que todo el mundo quiere visitar: el de Eva Perón. La que fue primera dama de Argentina, entre muchas otras cosas, se encuentra en el panteón de la familia Duarte.
Cementerio de Highgate en Londres, Inglaterra
En la primera mitad del siglo XIX Londres se encontró con un problema, las muertes eran numerosas, los cementerios de la ciudad no daban abasto y su salubridad empeoraba las cosas. De ahí que se abrieran nuevos cementerios fuera de la ciudad y el de Highgate fue uno de ellos, siendo inaugurado en 1839. Un cementerio victoriano que es todo un símbolo de la ciudad, donde descansan unas 170.000 personas repartidas en 53.000 tumbas, y donde podrás encontrar, por ejemplo, el lugar donde yace Karl Marx.
Cementerio Central de Viena, Austria
Con el crecimiento demográfico la ciudad de Viena necesitaba más espacio para enterrar a sus difuntos, y de ahí que en 1874 se inaugurara el Cementerio Central, con una superficie de dos kilómetros cuadrados. En el Zentralfriedhof sentirás una especial conexión musical pues aquí están enterrados compositores como Beethoven, Brahms y Strauss, y Mozart tiene su propio monumento aunque no descanse aquí. Se pueden adquirir audioguías para recorrerlo.
Cementerio alegre de Săpânța, Rumanía
El de SÄpânÈa, en Rumanía, es un cementerio que no tiene nada que ver con cualquier otro. Aquí no hay penas ni tristeza, sino alegría y colores. Y no solo por el diseño de sus tumbas, sino también por los mensajes que transmiten sus epitafios, llenos de ironía y humor negro. Un lugar donde entender la muerte de una manera diferente y que es recomendable visitar con un guía local, las inscripciones están en rumano y sin ayuda es difícil apreciar su sentido. Es sin duda una de esas cosas que no siempre se conocen de Rumanía.
Cementerio Nacional de Arlington en Virginia, Estados Unidos
Muy cerca de Washington D.C., al otro lado del río Potomac, se encuentra uno de los cementerios más espectaculares de Estados Unidos. Arlington National Cemetery es una gran pradera verde donde descansan soldados de infinidad de guerras y donde hay tres puntos claves que no te puedes perder: el mítico memorial de Iwo Jima, la tumba del soldado desconocido y la tumba de John Fitzgerald Kennedy.
Antiguo Cementerio Judío de Praga, República Checa
Miles de lápidas apretadas unas junto a otras dan forma al antiguo cementerio judío de Praga. Se calcula que hay unas 12.000 tumbas y posiblemente más de 100.00 judíos aquí enterrados, pero exactamente se desconoce el número de personas pues desde que tuvo lugar el primer enterramiento en 1439 se superpusieron unos diez niveles de tumbas, unos sobre otros, hasta que dejó de utilizarse en 1787.
Ataúdes colgantes de Sagada, Filipinas
El de Sagada, en la isla de Luzón de Filipinas, ni es un gran cementerio ni hay personajes conocidos, pero sus ataúdes colgantes te llamarán poderosamente la atención. No busques tumbas a dos metros bajo tierra, sino féretros de madera anclados en la ladera de un acantilado de la montaña a diferentes alturas. Esta costumbre comenzó al querer dejar los cuerpos lejos del alcance de los animales, pero hoy en día ya se ha convertido en toda una tradición.
Cementerio de Okunoin, Japón
El cementerio de Okunoin está en Wakayama, en el monte Koya (Japón), y suele visitarse cuando uno se acerca a conocer el camino sagrado del Kumano Kodo. Más de 200.000 tumbas se reparten por un bosque de cedros centenarios cubiertas de musgo rodeadas de leyendas. Se puede visitar por tu cuenta pero también se ofrecen visitas guiadas, tanto diurnas como nocturnas. Si vas en solitario y de noche prepárate a vivir una experiencia única.
Cementerio estadounidense de Normandía, Colleville-sur-Mer, Francia
En Normandía, y no muy lejos de las playas donde tuvo lugar el desembarco del día “D” de la II Guerra Mundial, se encuentra este cementerio conmemorativo donde descansan 9.387 militares estadounidenses. En diseño recuerda mucho al de Arlington, con lápidas blancas sobre una gran explanada de césped, y se encuentra sobre un acantilado con vistas a la playa de Omaha y al Canal de la Mancha.
Cementerio de South Park Street en Calcuta, India
Cuando uno viaja a India no va pensando en visitar cementerios precisamente, pero si se pasa por Calcuta el de South Park Street merece una visita. En medio del bullicio de la ciudad se levanta este remanso de paz, con tumbas de estilo gótico engullidas por la vegetación, donde se llevó a cabo el enterramientos de colonos cristianos. Fue inaugurado en 1767 y clausurado en 1790.
Cementerio Père-Lachaise de París, Francia
El Père-Lachaise no solo es el cementerio más grande de París, sino también uno de los más famosos del mundo. Fue inaugurado en 1804 y aquí descansan personajes ilustres como Jim Morrison, Oscar Wilde, Delacroix, Marcel Proust, Frederic Chopin o Fontaine, entre muchos otros. Aquí encontrarás además importantes memoriales por los miles de judíos franceses deportados a campos de concentración nazis.