El Ayuntamiento Marbella hizo pagos encubiertos a Enrique Cerezo y Espartaco Santoni

El Ayuntamiento de Marbella, mediante sus sociedades municipales, hizo pagos al presidente del Atlético de Madrid, Enrique Cerezo, y al actor Espartaco Santoni camuflados como abonos a otras empresas públicas, según se ha puesto hoy de manifiesto en el juicio del caso Saqueo II.

El exabogado del consistorio Modesto Perodia, uno de los principales acusados de los 35 que figuran en esta causa, ha sido interrogado hoy en la Audiencia Nacional por su participación en la presunta trama para desviar unos 70 millones de euros del ayuntamiento entre 1994 y 2001 a través de empresas públicas y privadas y con dádivas a los concejales, así como un impago de 91,5 millones a la Seguridad Social.

Perodia, que se enfrenta a una petición fiscal de 12 años y medio de cárcel, fue administrador, secretario y apoderado de varias de las 31 sociedades creadas por el gobierno municipal de Jesús Gil en 1991 y que sirvieron supuestamente para desviar el dinero público.

El fiscal le ha preguntado por varias operaciones sospechosas de estas empresas, una de ellas un cheque por 5 millones de pesetas entregado en agosto de 1995 al presidente del Atlético de Madrid, Enrique Cerezo, con cargo a la sociedad Eventos 2000 y que esta empresa contabilizó como una transferencia a otra sociedad municipal.

A este respecto, Perodia ha dicho al tribunal que él no quería pagar este cheque, que firmó, porque no le constaba “ningún dato” que lo avalara, por lo que preguntó a Gil a qué respondía.

El exalcalde le dijo que lo hiciera porque se trataba de un pago a Cerezo por unas cantidades que le debía el club Atlético Marbella (que había vendido el Ayuntamiento en 1994 a una empresa privada) al Atlético de Madrid por unos jugadores cedidos.

“El alcalde Jesús Gil me llama y me dice: 'estos son los gastos de las letras de cambio que no se pagaron de unas transferencias de jugadores'. Yo le dije: 'no me consta a mí eso, y él me dijo: 'tú págalo porque son las transferencias, los gastos bancarios y demás de las letras de cambio que se dieron, o impagos que hubo, de las transferencias de dos o tres jugadores del Atlético de Madrid al Atlético de Marbella'”, ha dicho.

Otras de las operaciones sospechosas se hicieron al fallecido Espartaco Santoni por parte de la empresa pública Sporclub, de la cual el actor figuraba como apoderado, sin que, según la Fiscalía, hubiera realizado ningún servicio a la sociedad.

Entre 1994 y 1995, esa empresa pagó 10 millones de pesetas a Santoni como salario primero y por servicios profesionales luego, y un año después se le abonaron 1.160.000 pesetas como “honorarios”.

En 1994 Sporclub pagó a Santoni otras 550.000 pesetas, esta vez de forma encubierta, ya que la sociedad municipal lo contabilizó como pagos a otra empresa del ayuntamiento.

Perodia se ha desvinculado de estos abonos y ha dicho ser la primera vez que los veía, al tiempo que ha afirmado que “todo lo que hacía Espartaco era controlado por Gil” porque no tenía “ninguna confianza” en él.

Asimismo, durante su interrogatorio se le ha preguntado por el pago de gastos del Atlético Marbella por casi 500 millones de pesetas entre 1995 y 1998, cuando el club ya no pertenecía al ayuntamiento, sino a una empresa privada.

Al respecto Perodia ha explicado que Spitia no pagó al consistorio la compra del club ni tampoco abonó los gastos corrientes, por los que Gil decidió asumirlos para que “no desapareciera el club”.

Tras la declaración hoy de Perodia, la sección tercera ha acordado un receso y el juicio seguirá esta tarde con el interrogatorio del exconcejal Esteban Guzmán.

Entre los acusados en este juicio figuran el exalcalde Julián Muñoz, que se enfrenta a 13 años y medio de prisión, los ex primeros ediles Marisol Yagüe y el exfutbolista Tomás Reñones, así como el principal acusado del caso Malaya, Juan Antonio Roca.