Kutxabank ha decidido mantener el servicio de oficinas móviles que atiende a 16 municipios alaveses y que tenía previsto suspender desde el próximo 31 de julio. Desde ese anuncio la entidad bancaria había recibido varias cartas de los ayuntamientos afectados y de particulares denunciando la supresión del servicio de atención financiera que atiende a cerca de 3.000 clientes.
Kutxabank tomó esta decisión “consciente de la incomodidad que generaba” admiten desde la propia corporación, pero “teniendo en cuenta que las distancia con la oficina más cercana no supera en ningún caso los 5 km, el servicio es escasamente eficiente y muy costoso”, explican.
Aun así la entidad ha tenido en cuenta las quejas recibidas y ha decido mantener las oficinas móviles “por su función social” reconocen, y así se lo han hecho saber a los 16 ayuntamientos mediante una carta firmada por el presidente de Kutxabank, Mario Fernández. “La dirección de Kutxabank no puede hacer dejación de su responsabilidad social”, reza el escrito, pero poder mantener el servicio obliga a una serie de modificaciones que tienen que ver con su estructura y su perioricidad. “Hacemos el esfuerzo mantener el servicio a todas las localidades que lo recibían hasta ahora, pero nos vemos obligados a reducir las visitas”, explican desde Kutabank, y pasarán de tres a semanales a una o dos en función de la localidad.
Así la oficina móvil se acercará los lunes a Salinillas de Buradón, Peñacerrada y Kripan. Los martes a Bóveda, Salinas de Añana y Puentelarrá. El primer y tercer miércoles de mes a Fontecha, Armiñón y Albaina. El segundo y cuarto miércoles de mes a Naváridas. A Leza, Zambrana y Moreda. Y los viernes a Gopegi y Barrón.