La Junta de Andalucía ha activado la fase de preemergencia ante riesgo de inundaciones (PERI), con situación operativa cero, ante la situación registrada en el Poniente de Almería donde se han activado avisos amarillos por lluvias y tormentas este lunes.
Según ha indicado el servicio unificado de emergencias 112 Andalucía, el aviso amarillo, que se extiende a la capital, permanecerá activo hasta las 21:00 horas de este martes conforme a los datos facilitados por la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).
El aviso amarillo por lluvias, activo desde las 16:00 horas, contempla precipitaciones acumuladas de hasta 50 litros por metro cuadrado en 12 horas, toda vez que también hay riesgo de tormentas en la zona.
Carreteras afectadas
Fuentes del 112 han indicado a Europa Press que se han recibido algunos avisos a partir de las 16:00 horas especialmente por carreteras afectadas, entre ellas la autovía A-7 a su paso por el kilómetro 831 a la altura de Balanegra.
La propia DGT ha comunicado condiciones difíciles de circulación en ambos sentidos, en torno al kilómetro 829. En este sentido, varios conductores han alertado de la existencia de fuertes lluvias en la zona, que han afectado temporalmente al tráfico y ha obligado a movilizar a bomberos para tareas de drenaje.
Las lluvias han afectado también a la carretera del entorno de Pampanico, en El Ejido, en el que además se han registrado llamadas por varias alcantarillas desbordadas. Además, la lluvia ha propiciado la salida de distintas ramblas que, por el momento, no han provocado daños personales.
El Sistema Automático de Información Hidrológica (SAIH) de la Red Hidrosur ha reportado precipitaciones de hasta 31,7 litros por metro cuadrado caídas en el canal Benínar-Aguadulce, con 41,5 litros por metro cuadrado acumulados en las últimas 12 horas.
“Momentos de incertidumbre”
La alcaldesa de Balanegra, Nuria Rodríguez, ha informado en declaraciones a Europa Press que se han vivido “momentos de gran incertidumbre” porque la rambla “venía con muchísima agua” desde zonas por encima de Balanegra y Campo de Dalías de forma repentina.
La regidora ha detallado que en ciertos momentos la rambla presentó un caudal abundante, lo que provocó cierta preocupación entre los vecinos, si bien “ya está bajando el nivel” sin que se hayan dado lluvias, lo que ha permitido aliviar las tensiones iniciales.
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